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Aurora Morfín, la diseñadora de banderas sin patria

El orgullo nacional es algo que los españoles tenemos atrofiado. Nuestra bandera tiene un tufillo de algo pasado que sólo los futboleros parecen haber superado, aunque no del todo. Los colores se han politizado y el que ondea la rojigualda es tildado de muchas cosas. Las banderas son sólo un icono, una representación gráfica de un país. Quizá la de España no sea la más bonita y puede que haya quien le cuesta ver que ya no tiene un águila en su escudo. En cualquier caso, una bandera representa algo que para Aurora Morfín va más allá de una nación.

Esta mexicana diseña en su estudio de Brooklyn las banderas que representan los valores que deberíamos tener presentes en nuestra sociedad. Estudió diseño en México y dejó su trabajo como directora creativa en una agencia de publicidad de Manhattan para volver a estudiar en el FIT y sacarse un certificado de empresa creativa. «Esto me ha dado más conocimiento del lado de negocios en pequeñas empresas. Tenía todo el lado creativo cubierto, pero muy poco del lado de negocios», comenta.

aurora olam

Cuando comenzó sus estudios de moda, pretendía montar un negocio de vestidos con un modelo parecido al de Toms, en el que al comprar un producto se dona otro a gente necesitada. Pero aquello no funcionó y de manera orgánica e intuitiva, y en la búsqueda de encontrar algo que aportase más significado al mundo, nacieron sus banderas. «Hace algo más de dos años mi vida tomó varios giros inesperados. Pasé por momentos de mucha confusión. En el proceso emergieron muchas ofuscaciones del pasado. En ese momento de búsqueda y sanación fue cuando pulí las banderas, las cuales me dieron rumbo y crecieron conmigo», cuenta la diseñadora.

Inspirada en sus viajes, su paso por la vida y lo que los valores en sí simbolizan, desarrolló una imagen minimalista con un gran trasfondo, una especie de movimiento positivista para una sociedad algo confundida. Un recordatorio visual y sutil de unos valores que no deberíamos perder.

aurora olam

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«Los colores y los posicionamientos de cada diseño tienen una razón de ser. Por ejemplo la parte negra en la bandera de “nuevos comienzos” es un horizonte que representa una base sólida que se ilumina con el sol, un sol que sale para todos», explica la alegre mexicana.

En su trabajo de conceptualización de algunos valores universales, Morfín dice que las etiquetas y representaciones territoriales que como sociedad hemos utilizado no reflejan los resultados que como seres humanos quisiéramos. «Existen muchas paredes a nuestro alrededor que no nos dejan conectar, alejándonos de quienes somos inherentemente. Por eso creo que hoy necesitamos nuevos iconos que nos representen y nos unan, valores que todos tenemos», añade.

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La mexicana cree que la manera más rápida de conectar la imaginación (o el sueño de lo que queremos lograr) con la realidad son las intenciones apoyadas con nuevas creencias. Sólo así seremos capaces de cambiar.

Morfín confía en el momento de despertar en el que nos encontramos, y quiere seguir positiva ondeando sus banderas para así recordar a los que buscan el cambio como ella, a mantenerse alineados con sus valores.

Veremos por dónde sopla el viento.

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Fotos: Fernando Paz

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