Categorías
Creatividad

Eike König: diseñar para gigantes como Nike con las tipografías más sencillas

Eike König, creador del estudio HORT, urdidor de la cartelería y los rótulos identificativos de marcas como Nike, recuerda haberse enamorado del diseño y de la tipografía gracias al miedo a un apocalipsis mundial.

«Nací en la Guerra Fría y las revistas estaban llenas de gráficos de información que mostraban cuán jodido estaba el mundo», recuerda. Pasando páginas de papel grapado, el joven iba aprendiendo qué alianzas o movimientos geopolíticos aproximaban la autodestrucción de la especie. «Me conmovieron profundamente esos pequeños gráficos y me interesé por la profesión que estaba detrás». Así aprendió cómo el continente, las letras y la composición, es parte de las emociones del mensaje.

Obra del proyecto personal de König.
Obra del proyecto personal de König.

El diseñador equilibró aquella inquietud cataclísmica con el entusiasmo por la música. Coleccionaba discos, admiraba las portadas y seguía la pista de sus autores, como Storm Thorgerson, del grupo de diseño Hipgnosis, que puso sus seísmos oníricos al servicio de bandas como Pink Floyd o Led Zeppelin; o Vaughan Oliver, autor de las carátulas de los Pixies.

Thorgerson navegó la era de la eclosión  del hard rock y supo ayudar a crear el paisaje plástico que iba a acompañar a esa música siderúrgica, rabiosa y psicodélica; la imaginería que ayudaría a dar color y formas también a los sentires, pesares y vivires de los 70 y los 80.

König trató de hacer algo semejante con otra criatura musical: «Nació un nuevo género, el TECHNO, y no tenía rostro», cuenta.

Trabajó como director de arte de Logic Records de 1993 a 1944, año en que una banda ajena al sello le pidió una portada. Su contrato no le permitía aceptar el encargo, pero al diseñador alemán no le apetecía plegar tan pronto el abanico de su creatividad: «Quería trabajar con diferentes personas y decidí dejar mi trabajo y dirigir mi propio negocio». Nació HORT.

Había, en fin, que inventarle una cara a la música TECHNO. «Me divertí mucho y lo acepté como un desafío para crear muchas estéticas diferentes. Hice ilustraciones, fotografías, tipografías simples; no me centré en un estilo exclusivo».

Obra del proyecto personal de König.

Este trabajar aplicando brocha sobre la música y soplándole el polvo para encontrar su esqueleto, su forma física secreta, fue para el diseñador el gran motor creativo que lo impulsó a otros territorios: «Las cubiertas son, en sí, un lienzo impresionante, un patio de juegos que puedes usar como tarjeta de visita».

El área de impacto del sello HORT se expandió a todo tipo de marcas y productos, desde el ámbito de la cultura al más comercial (Microsoft, Volkswagen, New York Times, IBM, …).

Campaña para Nike.
Campaña para Nike

Más de dos décadas después, König se resiste, en principio, a lanzar una descripción de la producción de su propio proyecto: «Es difícil definirlo sin sonar a bullshit», pero finalmente se atreve a calificar las creaciones de su equipo: «A veces son ruidosas, a veces, tranquilas, pero siempre están guiadas por un concepto y tienen un ojo puesto en la historia y el potencial del producto».

Asegura que no hay pasos definidos y que no funcionan con un proceso pautado. Los métodos y los ritmos varían, aunque el fin se mantiene: los creadores tienen que ser conscientes de que sus decisiones construirán, en muchas ocasiones, «la base de la identidad» de la marca.

König no busca necesariamente tipografías espectaculares y originalísimas, en muchos de sus trabajos, simplemente, redescubre el potencial dormido de los moldes más comunes (la posibilidad de lo extraordinario dentro de lo ordinario).

«Para la identidad de Bauhaus Dessau, elegimos las tipografías más genéricas Courier y Arial con el objetivo de apoyar la idea del Design Democracy, un aspecto importante del movimiento. Son de uso gratuito y vienen instaladas en el ordenador».

Cartel para Bergen Assembly.

Para Bergen Assembly, por ejemplo, tomaron MSGothic. «Lo curioso es que muchos diseñadores están diseñando glifos especiales para hacer que su trabajo sea más sobresaliente visualmente. Aquí hay un tipo de letra (MSGothic, un conjunto extraño de más de 30.000 glifos) que, cuando lo usas, es incluso mejor que si lo diseñas. Crea momentos especiales que nunca te esperarías», señala.

La inspiración de Eike König se nutre, afirma, de las personas con las que trabaja y de su interés por el arte contemporáneo, la tecnología, la arquitectura, la literatura, las artes escénicas… «Solo tienes que abrir tu mente y muchas cosas sucederán y te activarán», resume. En su opinión, para vivir en las aguas del diseño hace falta asumir desafíos y, sobre todo, huir de la excesiva seriedad.

Por Esteban Ordóñez Chillarón

Periodista en 'Yorokobu', 'CTXT', 'Ling' y 'Altaïr', entre otros. Caricaturista literario, cronista judicial. Le gustaría escribir como la sien derecha de Ignacio Aldecoa.

Salir de la versión móvil