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El regalito del viernes: El arte urbano antes de Banksy

Si a tu abuelo le hubieran dicho que lo de pintar paredes por las calles se iba a convertir en un arte, te hubiera llamado loca. Y, sin embargo, ahí están los grafiteros y artistas urbanos, con el gran Banksy a la cabeza. Con uno de ellos empieza este regalito. ¡Vamos a ello!

[pullquote]«Si de verdad te consideras grafitero, tienes que hacer cosas ilegales».
Ramón[/pullquote]

1.-Hasta Banksy tuvo un precursor

Los orígenes de Banksy, así han titulado este magnífico hilo de Twitter que presenta a un grafitero parisino de principios de los 80 con un sorprendente parecido con Banksy, tanto en estilo como en temática.

Se llamaba Xavier Prou, pero era conocido con el nombre artístico de Blek le Rat. Haz scroll hacia abajo y disfruta.

2.-Piensa en Whopper

Un pequeño viaje en el tiempo a través de un gran anuncio de Burger King. La vida de su célebre Whopper —que confieso no haber probado nunca— coincide con la mía, porque arrancó en los 60.

Además de recrear magníficamente distintas épocas, el anuncio me ha parecido una muy inteligente forma de presentar sus burgers de pollo. We give up dura un minuto.

3.-Las marcianadas carísimas que te puedes comprar en Dubái

Ambulancias limousine, vuelos comerciales con halcones, coches con incrustaciones de diamantes, cajeros automáticos para lingotes de oro, establos de mármol… Son solo algunas de las cosas increíblemente caras, rayando incluso la obscenidad, que encontrarás en Dubái (gracias, Vicente)

4.-Los guardianes del coral

Unas muy singulares esculturas acaban de llegar a los fondos marinos para custodiarlos. Son los guardianes del coral.

5.-¿De verdad que no quieres un seguro de decesos?

Una muy efectiva y potente campaña de una aseguradora neozelandesa: al parecer, en ese país los datos de contratación de seguros de deceso son especialmente bajos, y consiguieron revertir significativamente eso llegando a un acuerdo con la productora de una serie de asesinatos sin resolver.

Todos los episodios acababan en una misma morgue y ahí es donde entró el mensaje de la aseguradora, resucitando a los asesinados de cada capítulo para que explicaran que habían muerto sin seguro de vida.

Last Performance, de Partners Life, dura dos minutos.

6.-La pequeña gran diferencia de los tiempos en Fórmula 1

Viendo la clasificación, las diferencias entre coches y pilotos de Fórmula 1 parecen abismales, pero si te paras a pensar en el tiempo que cede el peor de los coches al mejor, ves que, en realidad, son mínimas. A modo de ejemplo, en la sesión de calificación del pasado fin de semana en Montmeló, la diferencia entre el mejor y el peor coche fue de apenas 2,4 segundos… en un circuito de 4,675 kilómetros.

Este hipnótico vídeo de 1’11 segundos comparando los tiempos de Max Verstappen y Fernando Alonso en Montecarlo muestra la increíble igualdad entre ellos.

7.-Lo nuevo de Wes Anderson

Buenas noticias para la legión de admiradores de Wes Anderson: ya está aquí su nueva película, donde el color del desierto se suma a su habitual paleta de tonos pasteles. Y, por supuesto, su obsesión por la simetría sigue ahí.

El tráiler de Asteroid City dura 2:30.

8.-Palabra de Tarantino

Hablando de cine, os recomiendo mucho el libro de Tarantino Meditaciones de cine, en el que explica con su personalísimo estilo y humor cómo se fraguó el Hollywood moderno. Después de una extraordinaria introducción hablando de las películas que vio de niño, empieza a diseccionar distintas películas. La primera de la lista es Bullit, dirigida por Peter Yates, con Steve McQueen interpretando magistralmente a un policía de San Francisco.

Esa lectura me hizo recordar la que probablemente sea la mejor escena de persecución de coches de la historia del cine, donde un impasible y hierático McQueen conduce un Ford Mustang, mientras persigue a dos no menos impasibles mafiosos a bordo de un Dodge Charger. El realismo de esa larga escena —dura diez minutos, aunque la verdadera acción empieza en el 3:15— es impresionante.

Postdata

Un buen amigo de este regalito de los viernes, el profesor Roberto Álvarez, especializado en marketing y neurociencia, vuelve a publicar tras cuatro años de investigación, y me envía este texto que ha preparado su editorial:

«La belleza atrae, fascina, entusiasma, enamora, inspira y seduce. Belleza, neurociencia y marketing: El Valor de la estética en las experiencias y en las emociones es el resultado de una investigación de cuatro años realizada en Rockefeller University, en Nueva York, y en la Stern School of Business, de la Universidad de Nueva York (NYU). Con abundantes casos prácticos y fascinantes argumentos intelectuales, este elegante manual trata aspectos económicos de la belleza, su valor y su efecto en productos, las marcas y su impacto en el mercado. Leerlo es un verdadero placer. Incuestionablemente, es uno de los mejores libros escrito sobre el tema».

Si quieres saber más, consulta su ficha (gracias, Roberto, y éxitos con este nuevo libro).

Buen fin de semana.

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