Se terminan las celebraciones navideñas. Ahora sí que toca celebrar, sobre todo si has llegado vivo a la Noche de Reyes. También toca ir terminando con los refritos de contenidos de 2015 con los que los medios hemos torturado a nuestros lectores.
Toca asumir los fracasos del año, esos artículos que confeccionamos con la seguridad de que optarían al Pulitzer y que, finalmente, se quedaron como el brillante alumno de EGB que acaba haciéndose yonki al probar los caramelos con droga de la puerta del instituto.
Estábamos realmente convencidos de que estos post cambiarían la forma occidental de concebir la sociedad, que servirían de trampolín para que el pensamiento del siglo XXI alcanzara cotas de excelencia. Ya sea porque sobreestimamos el contenido del artículo o porque os gusta más un titular con las palabras «teta» o «picha», no conseguimos el objetivo.
Nos regodeamos en el fracaso a la vez que otorgamos a estos artículos una segunda oportunidad. Si Mourinho podría tenerla, ¿por qué estos posts no?
¿Por qué nadie me ha enseñado a intuir? Vanessa Bejarano descubrió que en las oficinas se desperdicia mucha información, especialmente, la información intuitiva. Ella quería introducir más elementos en sus procesos de trabajo y decidió llamar a lo que hacía ‘diseño empático’ o ‘diseño emocional’.
El día en que se inventó la primera droga de laboratorio. Una gran noticia para la drogadicción en general. Se conoce que hay personas que comenzaron a celebrarlo en 1977 y aún andan de fiesta.
Un diseñador te reta a un mes continuado de noes para superar tus miedos. A algunos no nos cuesta nada decir ‘no’ todo el tiempo. Al Dr. No, tampoco. Pero ¿alguna vez te has planteado la dificultad de contestar exclusivamente que no a todo? ¿Y que eso sirva como terapia contra el miedo?
¿Es el bar el mejor lugar para aprender ciencia? Ya te lo decimos nosotros: rotundamente sí. Por eso, la chavalada de Ciencia en el Bar te explica los procesos físicos que acontecen en el universo como Dios manda: con cerveza y chorizo.
Tu español y el mío no son el mismo idioma. Porque no es lo mismo una polla en España que en Hispanoamérica. Con el lenguaje coloquial hemos topado, que tiene la gran habilidad de hacer que el español de España y el de América parezcan dos idiomas distintos aunque la palabra que toman como base sea idéntica. Muchas están corroboradas por el Diccionario. Otras, internet nos previene de su uso en según qué países.
«Guía Trotamundos» para invadir Alemania. Que no se puede uno lanzar a lo loco a invadir Alemania como si nada. Que tampoco es tan fácil.
Los asexuales reivindican su hueco. Porque hay gente a la que no le pide el cuerpo un meneo sabrosón. La autora norteamericana Julie Sondra Decker (1978) publicó en septiembre un libro llamado The invisible orientation (La orientación invisible) para hacer constar que la asexualidad no es un vocablo, sino «un movimiento».
¿Por qué lloramos por un niño cuando están muriendo mil? Las razones psicológicas que nos empujan a preocuparnos de un único niño o un grupo de personas muy reducido, como los pasajeros de la tragedia de Germanwings, por encima de los millones que están pasándolo mucho peor, se conoce muy bien en psicología. Mira de qué va la cosa.
El club donde nació la cultura Hacker. La mayor comunidad de geeks (y tal vez el mayor grupo de nerds) jamás reunido en un club probablemente sea el Tech Model Railroad Club del MIT. Allí fue también donde se acuñó el término hacker.
¿Cuánto hay de estafa y cuánto de realidad en la economía colaborativa? Merece la pena preguntarse cuáles son las características que asociamos intuitivamente con la economía colaborativa para diferenciar de una vez a estos emprendedores de lo que hacen grandes multinacionales como Airbnb, Blablacar o Uber.
El matrimonio que vive hoy en la época victoriana. Estos dos historiadores viven como si su tiempo no fuera este. Sarah y Gabriel Chrisman estudian el final del siglo XIX viviendo como lo hacían en ese periodo en EEUU.
Cuatro años caminando en Minecraft y otros disparates que pasan en los mundos virtuales. Porque en la vida digital hacemos cosas aún más extrañas y estúpidas que en la vida real. Que ya es decir.
El ladrón de fotos de Instagram busca secuaces. Lleva meses robando imágenes de Instagram para invadirlas con sus ilustraciones. Pero Lucas Levitan sabe que él solo no puede ocupar todas las fotos de la red social. Necesita a alguien que le libere de trabajo. Por eso acaba de lanzar una app para reclutar secuaces que tuneen sus propias imágenes.
¿Está robando el capitalismo tus horas de sueño? Jonathan Crary explica en su libro 24/7 el descrédito del descanso en el sistema actual del consumismo hiperconectado
Food Typography: Cómete (literalmente) tus palabras. Los diseñadores de Side by side decidieron un buen día utilizar comida en sus diseños. Estas letras te las puedes zampar sin problema.
El pimentero que inhibe la señal de los móviles de los comensales. A la vista parece un pimentero corriente que se camufla y pasa desapercibido entre los demás elementos de la mesa. Sin embargo, en su interior esconde algo más: un mecanismo que con un leve giro apaga el televisor, las tabletas y desactiva los móviles durante 30 minutos.
I Love Mistakes, una apología de la pifia. Comenzó cometiendo un error. Ese fue el primer acierto. Bernat Moreno comenzó a escribir y dibujar I Love Mistakes pensando que remataría la tarea en unas seis semanas. Abundar en la riqueza del error no es algo que uno pueda abandonar así como así y finalmente, la misión se ha prolongado a lo largo de cinco meses.
Ciencia ilustrada para niños de 0 a 99 (por científicos que se han bajado del pedestal). «Queríamos hacer las cosas de otra manera para dirigirnos a gente que no necesita tener conocimientos de ciencia para entretenerse con una buena historia con todo el rigor científico. Fue así como surgió Principia».
Las rebanadas de vida ‘japo’ de Daisuke Nimura. El japonés cuenta que, originalmente, sentía que su trabajo era solo dibujar una imagen. «Mis ilustraciones eran algo así como cortar una escena de la vida cotidiana». Sin embargo, decidió concebir la creatividad como el camino hacia una sensación de paz con un objetivo adicional: «Que la diversión no sea solo para mí».