Cada uno de estos números es un laberinto y solo es posible salir de uno de ellos. Así lo decidieron sus constructoras, Ángela y Elena, del estudio de diseño gráfico Happyending para la sección de Numerografía de Yorokobu de este mes de marzo. Pensaron también que para armar esta colección de dígitos buscarían un argumento que acabara de forma feliz, es decir, un ‘happyending’ y eso es lo que ocurre cuando alguien está dentro de un laberinto y halla una puerta que lo saca por fin de ahí.
Las ilustradoras lanzan un reto. Las 10 primeras personas que les envíen una foto que muestre la salida del único número del que se puede escapar recibirán una lámina impresa en risografía de edición limitada de estos números. La dirección para mandar la vía de huida es hello@wearehappyending.com