Además de ofrecer sus dibujos para publicaciones y marcas, muchos ilustradores están recurriendo a otras fórmulas para vivir de su trabajo. Hay quien diseña camisetas, pósters, chapas o pinta murales por encargo. Una de las que más está ayudando al ilustrador a Ricardo Cavolo para ganarse la vida es el diseño de tatuajes. «No digo que sea mi mayor fuente de ingresos, pero sí el más constante», explica.
«Empezaron a encargármelo amigos o gente que veía mis propios tatuajes y sabían que eran a partir de dibujos míos. Luego empecé a colgar en mi blog los tatuajes que diseñaba para mis amigos», comenta.
Una cosa llevó a otra y desde entonces ha recibido encargos de Inglaterra, Alemania, Italia, Francia, Rusia, Japón, Estados Unidos, México, Corea del Sur, Argentina y Colombia. «Yo les mando el diseño y ellos luego se lo llevan a un tatuador», indica el ilustrador.
Otro ejemplo más de que debemos dejar de cerrarnos solo en nuestra fronteras. Internet abre posibilidades inabarcables para quien sepa aprovecharlo.
Estos son algunos de los diseños de Cavolo que ahora lucen en el cuerpo de personas de todo el mundo.