Miguel Ángel Muñoz ya nos es MAM, aquel joven que atraía la atención de cientos de adolescentes gracias a su papel en la serie Un paso adelante. Hoy, con 40 años, ve las cosas de otra manera.
Sigue teniendo ilusión por su oficio y podría decirse que se encuentra en un momento muy dulce. Su paso por Masterchef le ha otorgado una popularidad aún mayor y se ha estrenado como director de cine con su película 100 días con la tata, en la que cuenta su experiencia cuidando durante el confinamiento de la mujer que le cuidó a él de niño. Una historia preciosa de amistad y de amor que le ha valido varios premios y reconocimiento internacional.
La idea, cuenta, era reflejar la especial relación que le une a su tata, pero también, de paso, retratar el confinamiento, las relaciones intergeneracionales y el síndrome del cuidador.
A punto de estrenar una comedia romántica rural, En otro lugar, cuenta que una de las grandes alegrías que le ha dado trabajar en ella es reencontrarse con dos grandes amigos: Pablo Puyol y Jesús del Cerro, algo que Muñoz califica como un regalo.
Miguel Ángel Muñoz no tiene miedo a envejecer, algo que ha aprendido de su tata. Y afirma sentirse más cómodo con las decisiones que toma y con cómo las toma.
De todo esto y más habla el actor y director en esta entrevista de Enrique Alpañés para Igluu.