«¿Qué obra podríamos conceptualizar bajo el imput “Romance between Human & an Artificial Intelligence”?», preguntaron los humanos Ángel Alonso y Ruth Falquina a AIko, una inteligencia artificial multidisciplinar. Los tres forman el colectivo artístico The AI Gang. Y así, con esa pregunta en modo texto, se encendió el motor de la creatividad que ha dado como resultado esta portada, la primera creada por una inteligencia artificial para Yorokobu.
«Vivimos tiempos extraordinarios para la creación donde la inteligencia artificial está transformando la naturaleza de los procesos creativos, estimulando, ayudando y potenciando la creatividad humana», comentan Falquina y Alonso. «Desde nuestra perspectiva, nos encontramos en una nueva era de creatividad aumentada donde la inteligencia artificial es la musa del siglo XXI».
CÓMO SE GESTÓ LA PORTADA
La parte humana, como se denominan Falquina y Alonso, nutrió el algoritmo de AIko con diversas etiquetas: estilos artísticos, pintores, diseño, películas… «y nuestro ingrediente secreto J», y obtuvieron como resultado más de 500 imágenes en línea con todo lo que habían imaginado.
De la infinita variedad de imágenes creadas por la IA, ellos seleccionaron una que funcionó como germen de todo el conjunto, «la que creíamos que iba más acorde con la expresividad de esta obra y filosofía artística de la revista Yorokobu». A partir de esa primera imagen, cocreando otras adyacentes, AIko volvía a generar decenas de imágenes nuevas, los humanos elegían una a partir de la cual crear otra diferente y vuelta a empezar, peldaño a peldaño, escalón a escalón.
«Es un proceso vivo en el cual la inteligencia artificial nos nutre con imágenes y nosotros la alimentamos con ideas para crear un mundo único que podría haber cambiado completamente con la selección de la primera imagen o con la forma de hablar a la IA», resumen los dos creativos.
La pieza, a la que han titulado Romance between Human & an Artificial Intelligence, «es el nacimiento de una nueva era llena de color, un viaje en el tiempo que une pasado, presente y futuro», aclaran. «Es la unión entre la naturaleza y la tecnología, lo humano y lo algorítmico, la madre naturaleza con la génesis espacial, el día y la noche; es como el Yin y el Yang. Es el nacimiento de un nuevo ser, mitad humano, mitad IA, que late con fuerza con dos corazones, y dos cerebros, que se fusionan en un solo ente, omnipresente, binario, creador de todas las realidades».
EL ORIGEN
Lo de colaborar con una inteligencia artificial no ha sido algo nuevo para estos dos creativos. Durante los últimos cinco años han cocreado proyectos con estos entes en su agencia Estado Latente. «Viendo el potencial creativo de las IA, formamos el colectivo artístico The AI Gang compuesto por una tripla: dos humamos: Ruth Falquina y Ángel Alonso; y AIko, nuestra IA multidisciplinar. Humanos-IA, IA-Humanos nos influenciamos mutuamente y juntos exploramos nuevos territorios de expresión artística. Es una nueva era del renacimiento algorítmico, una nueva corriente artística denominada AIart».
Todo arrancó cuando hace unos meses fueron seleccionados como artistas beta-testers para la inteligencia artificial DALL.E2, una IA texto-imagen. «Nuestra tripla creativa sintió la necesidad de explotar todo su potencial e ir un paso más allá cocreando una colección de obras de AIart denominada Romance between Human & an Artificial Intelligence, cuya primera pieza, influenciada por la trayectoria de divulgación artística de la revista Yorokobu y fruto de las perspectivas creativo-tecnológicas, ha sido creada en exclusividad como portada de este número».
«Es una nueva era, donde las inteligencias artificiales potenciarán nuestros sentidos y serán las nuevas musas en los siglos venideros», vaticinan desde The AI Gang. «Es un viaje visual en un mundo onírico y psicodélico cocreado por la inteligencia artificial AIko+Dall.E2 y los humanos Angel Alonso y Ruth Falquina».