Mitificar a algo o a alguien puede acarrear consecuencias insospechadas. Al envolver la realidad en un halo místico, casi divino, podemos llegar a ocultar parte de la verdad. Es lo que ocurrió según Bego Antón con las brujas, aquellas mujeres que durante la Edad Media se convirtieron en objetivo de una caza sin cuartel.
Que en el imaginario colectivo se haya impuesto la imagen de la bruja como una «anciana fea, con una verruga en la nariz y un sombrero acabado en punta, pero, sobre todo, como la personificación del mal» es algo que, en opinión de la fotógrafa bilbaína, desprestigia la memoria de aquellas mujeres.
«La figura de la bruja está embutida en la sociedad. Seguimos disfrazando a las niñas de brujas, algo que para mí no es inocuo sino gravísimo, porque perpetúa esa imagen de la mujer malvada cuando, en realidad, fueron víctimas de un invento de la Iglesia y del poder de la época, que trataba de despojar a la mujer de su valía. Mujeres perseguidas injustamente, algunas de las cuales se suicidaron, a otras las mataron, torturaron, violaron… ».
En su Haiek danak sorginak (Todas ellas brujas), Bego Antón se propone desmitificar la figura de la bruja para denunciar todo lo sufrido por aquellas mujeres. «Como sociedad, tenemos las responsabilidad de corregir este error y situar a todas esas mujeres en el lugar que se merecen. Rendirles homenaje, a la vez que enseñamos a la sociedad lo que ocurrió con ellas».
Antón tuvo que investigar mucho para dar forma a este trabajo. Buceó en las confesiones que se vieron obligadas a hacer muchas de aquellas mujeres. Testimonios terribles que le sirvieron para conocer una realidad que hasta entonces desconocía, y también para aportar rigurosidad a sus fotos. Cada aspecto de cada una de estas (vestuario, localización, atrezzo, etc.) está cuidado al milímetro. Muchas de ellas están acompañadas de su propio pie de foto, extractos de las confesiones que Antón leyó con minuciosidad.
«Mi propósito era crear un proyecto nómada con el que fotografiar a mujeres de diferentes lugares donde tuvieran lugar cazas de brujas. Pero pronto me di cuenta de que era algo muy complejo y decidí contar la historia a través de mis propias mujeres. Esto es, familiares y amigas. De ahí que el resultado sea un proyecto muy especial, porque con él logro conectar con aquellas mujeres de la antigüedad a través de mis propias mujeres».
GETXOPHOTO 2022: ESTE AÑO TOCA ‘IMAGINAR’
Haiek danak sorginak es uno de los proyectos que hasta el próximo 26 de junio forman parte de Getxophoto 2022. Después de 15 años celebrándose en septiembre, la 16ª edición del festival, la tercera consecutiva comisariada por Jon Uriarte, se celebra esta vez en junio y cuenta con una veintena de proyectos internacionales bajo el concepto Imaginar. Con él, el festival trata de explorar el papel que la imaginación juega en nuestras vidas y en la interpretación del pasado, el presente y el futuro. Pero también en la labor que desempeñan las imágenes a la hora de comprender la realidad.
Entre los fotógrafos que integran el cartel de este año, encontramos los nombres de los miembros del dúo suizo compuesto por Jojakim Cortis y Adrian Sonderegger, que presenta Icons. Una serie que invita a reflexionar sobre la veracidad de la fotografía, sobre todo en este momento de intenso debate social sobre la fiabilidad de las imágenes en la era de las fake news. Para ello, Cortis y Sonderegger deconstruyen algunas imágenes tan míticas como la del soldado caído de Robert Capa o el atentado de las Torres Gemelas.
Marisol Mendez, por su parte, presenta Madre, proyecto con el que analiza la imagen de la mujer boliviana y la complejidad de la cultura del país andino, a la vez que desafía al machismo «incrustado» en la sociedad. Mendez recurre para ello a fotografías antiguas y familiares y a retratos en los que las mujeres fotografiadas se representan como versiones confrontadas de María Magdalena y la Virgen María.
Otro de los platos fuertes del Festival será la instalación All that Hoopla de la artista británica Clare Strand. Una suerte de atracción de feria que se instalará en el Casino de Algorta en la que se invita al público a lanzar un pequeño aro sobre fotografías. Los que más puntería demuestren se harán con una pequeña copia de la artista.
El programa de este año se completa con charlas como las que llevarán cabo los artistas Juan Covelli y Gloria Oyarzabal, titulada La neutralidad no existe. A partir de los proyectos presentados en esta edición —Tesoro especulativo y Usus Frucus Abusus (La blanche et la noire), respectivamente— Covelli y Oyarzabal conversarán sobre colonialidad, expolio y la apropiación cultural de las instituciones museísticas.
NOVEDADES Y REENCUENTROS
Este año Getxophoto estrena tres espacios expositivos: las Galerías Punta Begoña, el Casino de Algorta y la fachada de la casa Daduena en el Puerto Viejo.
Otros aspectos del festival no cambian, sino que se refuerzan. Ocurre con su presencia online, ya que Getxophoto no concibe internet solo como un medio de comunicación o promoción, sino como un espacio donde acontece una parte importante de la programación del festival.
De ahí, por ejemplo, que el programa digital cuente con Canal Getxophoto en la plataforma de cine Filmin, bajo el comisariado del cineasta Lois Patiño. Por su parte, el colombiano Juan Covelli presentará los vídeos de su serie Tesoro especulativo, y el italiano Marco de Muttis estrena su proyecto Photographies without Photographer.
A todo esto hay que sumar el programa de conversaciones en el que destaca la ya clásica Encerrona y a la que hay que sumar el Hamaiketako (almuerzo, en euskera), así como el espacio Getxophoto Por. En él, cuatro creadoras ajenas al mundo de la imagen (la performer y cantante Yogurinha Borova, las bertsolaris Alaia Martin y Jone Uria y la escritora Toti Martínez de Lezea) explicarán su punto de vista sobre sus exposiciones favoritas.
Por segundo año, el Festival organiza MAPS (Mejores Amigos para Siempre), el encuentro entre estudiantes de escuelas de fotografía e imagen. El programa acoge a más de 40 alumnos y alumnas de centros de Barcelona, Madrid, Valencia, Orense y Bilbao, quienes podrán compartir sus trabajos y experiencias durante la Semana de Apertura del Festival. Además, algunos de ellos tendrá la oportunidad de exponer sus trabajos en Getxophoto 2023.
Otra iniciativa que repite es la Ruta posavasos, cancelada el año pasado a causa de la pandemia, y que este año se retoma con la colaboración, de nuevo, de los hosteleros locales. Se trata de una colección de ocho imágenes en formato posavasos, de los que cada bar distribuye un modelo en exclusiva.
Por otra parte, casi 40 comercios mostrarán en sus escaparates una selección de las fotografías recibidas de todo el mundo a través de la convocatoria de participación popular. Este proyecto se realiza en colaboración con los comerciantes locales y específicamente con la asociación de comerciantes Algortako Dendak.
Finalmente, con el objetivo de reducir el impacto medioambiental y ser un evento cada vez más sostenible, por tercer año consecutivo Getxophoto ha implementado un plan de buenas prácticas sostenibles. Algunas de las medidas que estamos llevando a cabo al respecto incluyen el fomento del transporte público y de la bicicleta, el uso y señalización de fuentes públicas del municipio, la reducción del material impreso y su reutilización, el uso de infraestructuras reutilizables o la promoción del ocio al aire libre y las actividades en familia, entre otras.
Y, por supuesto, Getxophoto 2022 cuenta con su programa de visitas guiadas en euskera y castellano que incluye recorridos diurnos y nocturnos (con linterna) durante todos los fines de semana de junio.
Tanto para estas como para el resto de actividades es imprescindible inscribirse a través de la web del Festival.