Madrid esconde multitud de secretos. Y no es que no quiera contarlos. Es que no sabe cómo hacerlo. “Madrid tiene un encanto, una historia y un sinfín de lugares que no vende ni explota”.
Manu García del Moral trata de revelar alguno de ellos en su blog Secretos de Madrid. Cuando llegó de su Pamplona natal no sabía nada de los misterios de la capital. De hecho desconocía hasta lo más típico de la ciudad. Reconoce que a su llegada no sintió el mínimo apego hacia ella.
Fueron los paseos diarios por sus calles los que, poco a poco, cambiaron la percepción del periodista. “Me fue seduciendo y sorprendiendo a partes iguales. Encontré un Madrid radicalmente opuesto al que me habían pintado”.
La casi compulsiva compra de libros que encontraba sobre la historia y los rincones de la ciudad era uno de los síntomas del creciente interés que Madrid estaba despertando en Manu. En unos meses, el enamoramiento era todo un hecho. “Siempre he pensado que para cada persona existe una media naranja perfecta en forma de ciudad. Algunos se pasan la vida buscándola y no la encuentran. A otros les llega de forma inesperada y sin buscarlo. Yo pertenezco a este segundo grupo”.
Eso mismo que sentía él, pensaba, podría pasarle a más gente. Era cuestión de tiempo. Pero no todo el mundo lo tiene cuando visita Madrid. “Mucha gente de fuera vienen un par de días y no salen del recorrido más turístico dejándose en el tintero cientos de cosas por descubrir. En muchas ocasiones no les da tiempo a más. Yo les recomendaría volver una segunda vez y visitar Madrid sin guías turísticas, perdiéndose por los barrios del centro”.
Pero los turistas no son los únicos que no conocen la ciudad. Para muchos madrileños la capital es una auténtica desconocida. Manu considera que el Patronato Municipal de Madrid podría hacer más de lo que hace en este sentido: “No vendría nada mal poner en marcha diferentes campañas a medio y largo plazo para despertar, especialmente en los madrileños, ese querer saber más sobre su ciudad”.
Aunque no toda la culpa es institucional. “Es una cuestión de dejadez, fundamentalmente. Seguramente, los madrileños son conscientes de lo mucho que tienen que ver en su ciudad pero lo van dejando, lo van dejando…Y al final, nunca van a los sitios, hacen su vida de barrio y pocas veces salen de su rutina”.
Manu constató esta teoría no hace mucho, cuando coincidió con una pareja de Madrid que rondaba la treintena y que nunca había estado en el Templo de Debod, “uno de los rincones más mágicos de Madrid”.
Para entonces, él ya había comenzado a escribir, en su blog, acerca de estos lugares. Pero también sobre las costumbres, historias, expresiones y dichos que aún se siguen utilizando en la ciudad y que tienen su origen en el Madrid de hace siglos, anécdotas, leyendas sobre el origen del nombre de algunas de sus calles… “Solo pretendo aportar mi granito de arena para que Madrid no siga siendo esa gran desconocida”. Al menos, para sus cerca de 50.000 seguidores que tiene en Twitter ya lo va siendo menos…
Sigue devorando libros sobre Madrid y de ahí es de donde saca gran parte de la información: “La historia está entre las páginas de los libros, esperando a ser descubierta”. De entre todos, destaca a una autora, María Isabel Gea Ortigas, “para mí la mejor cronista actual de la Villa y Corte y gran especialista en Madrid. Luego hay páginas webs que son maravillosas en cuanto a información y documentación madrileña como Viendo Madrid, Urban Idade o Caminando por Madrid, también foros de fotografía antigua».
“La clave –dice- está en permanecer todo el día con los ojos bien abiertos, a la caza y captura de posibles secretos, y tener paciencia a la hora de buscar y rebuscar historias”.