El taller de carpintería donde todo el proceso de fabricación se retransmite en tiempo real

¿Cambiaría tu forma de trabajar al saberte grabado continuamente? A los miembros de SUDACAS hace tiempo que eso dejó de importarles. Cualquiera, en cualquier momento, puede conectarse a su web y comprobar lo que se cuece en el taller de esta empresa argentina que fabrica muebles de madera. Para ellos es la mejor prueba de transparencia en el proceso.

Para su cofundadora, Mariquel Waingarten, transmitir en vivo los procesos de elaboración de sus productos supone una «puerta abierta con la que no hay manera de escapar de la realidad imperfecta y maravillosa de la producción de cada pieza».

Nada que ver, en su opinión, con los vídeos de ‘cómo se fabrica’ tan frecuentes últimamente: «No es lo mismo que experimentar el proceso en vivo. Porque la verdad siempre va a ser mas desprolija, más cruda, más inesperada, y eso la hace genuina y humana».

Ella lo comprobó en la visita a Buenos Aires. Ese día acompañó a su amigo, el diseñador y cofundador de Sudacas Alejandro Stticoti, a su taller para conocer los productos en los que andaba trabajando. «Quedé asombrada con la realidad del proceso productivo. Cuando entras a su taller, escuchas la radio argentina prendida de fondo, ves los rayos de luz que entran por las ventanas marcados por las virutas de la madera, una pila de troncos amontonados en un costado listos para convertirse en algo nuevo, un grupo de hombres con expresión noble y de oficio haciendo su labor en las maquinas… Todo estaba sucio, crudo. ¡Era muy real! Estar expuesta a algo tan genuino me dio una sensación de calidez que me llenó el alma».

Fue en ese momento cuando deciden armar el proyecto SUDACAS con la retransmisión en vivo los procesos de producción como uno de sus valores diferenciales. Su objetivo, «que cualquiera pueda sentir esa conexión humana y genuina con los objetos con los que se rodea, especialmente aquellos que elegimos para estar en nuestra casa. Así, una persona en Nueva York puede observar la creación de su biblioteca y crear su propia historia al respecto».

Trabajar un recurso natural como la madera propicia esta transparencia. «Es un material escaso y hermoso. Algo que es naturalmente perfecto debe ser intervenido lo menos posible». De momento, SUDACAS trabaja dos productos: una estantería y un perchero. Ambos llevan la firma de Sticotti: «Son diseños simples, de líneas puras, minimalistas, intuitivos y de calidad». Ambos se elaboran según los principios de la técnica japonesa Joinery, en la cual se prescinde de clavos, tornillos o recursos similares para unir las piezas. «Todo se resuelve con un sistema de encastre que es la base del diseño Sticotti».

Los sudacas de SUDACAS presumen de serlo y de ahí el nombre de la empresa: «Queremos burlarnos del significado peyorativo de la palabra y cambiarlo. Estamos orgullosos de pertenecer a Sudamérica. Y las practicas y culturas que nos caracterizan son las que hacen que el diseño y la elaboración de las piezas tenga una impronta emocional fuerte».

Próximamente, Sudacas presentará una línea de accesorios de madera fabricada a partir de los restos de producción y otra de adicionales para el sistema de bibliotecas. «Además estamos explorando nuevos diseñadores sudamericanos para incorporar otros objetos también más adelante».

La cámara seguirá grabando en tiempo real a los trabajadores mientras fabrican todas estas piezas. «Hace tiempo que se olvidaron de ella. Porque su foco, su interés, está en el ahora, en lo que hacen. Es una de las maravillas de trabajar con las manos: te obliga a estar en el momento». Waingarten sospecha que el ser grabado mientras se trabaja es algo que tienen más en cuenta los observadores que los trabajadores: «Lo que sí creo es que si el publico demanda esta misma transparencia en grandes corporaciones, seguramente obligue a estas a reconsiderar sus procesos productivos y sincerarse con ellos».