Las redes popularizaron la frase: «Vendo Opel Corsa». Sin embargo, lejos de tratarse de un anuncio real para vender un coche de segunda mano, los usuarios que la usan lo suelen hacer para señalar o acusar a otros de decir vaguedades o no aportar nada con sus comentarios. Pero ¿de dónde viene este meme?
El origen lo encontramos en este chiste:
. Tras la muerte de su esposa, un señor acude a la redacción del periódico local para publicar una esquela. Al preguntarle el redactor qué información quería transmitir, el señor, bastante tacaño por cierto, contesta:
. «María murió»
Ante la escueta respuesta, el empleado del diario, que sospechaba que el motivo no era otro que el presunto precio que debería pagar si optaba por un mensaje algo más largo, le comenta:
. No se preocupe por la extensión. La esquela tiene el mismo precio con dos o con cinco palabras.
A lo que el señor responde:
. ¡Ah, perfecto! Pues ponga entonces: «María murió. Vendo Opel Corsa».
La popularización del chiste dio origen al latiguillo «Vendo Opel Corsa», que con el tiempo ha conseguido superar en fama al propio chiste. De hecho, el «Vendo Opel Corsa» ocupa lugar de honor en el mundo meme, compartiendo espacio con otros de la talla de «No sé, Rick, parece falso» o el «¿Cómo están los máquinas?».
Es lo que pensó el community manager de Opel, encargado hace unos años de reconvertir el meme «para la causa». De hecho, durante un tiempo, en lo que antes se conocía como Twitter se corrió la voz de que cada vez que alguien utilizaba la etiqueta #VendoOpelCorsa, se aparecía de repente el CM de la marca alemana… Un caso digno del mismísimo Iker Jiménez.