El XOw multisensorial de David Muñoz

La grave voz en off lo advierte. Una vez que se dé comienzo no habrá vuelta atrás. Da igual quién seas, cómo seas… Él te encontrará, y cuando todo aquello vaya a llegar a su fin, suplicarás amablemente que no pare… Y no lo hará. El XOw de David Muñoz no tiene límite.

Con el corto que presentó durante el primer fin de semana del Festival de Cine y Gastronomía Film & Cook en Madrid* (que volverá a celebrarse los próximos 15 y 16 de noviembre en Madrid para viajar, el 22 y 23 de este mes, a Barcelona), el chef avisa de que la sorpresa y el desconcierto seguirán inherentes a su propuesta gastronómica.
«Había pasado un año desde que nos otorgaron la tercera Estrella Michelín y creíamos que era un buen momento para recapitular y entender qué era DiverXo en ese momento. Qué significaba la experiencia del restaurante, tanto de puertas para adentro como desde fuera».
De ese ejercicio de autoentendimiento, David y su equipo llegaron a la conclusión de que lo que salía de sus fogones era algo más único que nunca, desprovisto de cualquier referente culinario.«Es un XOw alrededor de la alta cocina. Una experiencia abrumadora».
El casting de actores del vídeo recoge el heterogéneo público que acude a DiverXo.«Hay gente de toda condición social, económica, cultural, gente más joven, más mayor… Todo el mundo va a sentir la misma experiencia»
Y pese al extravagante corto de presentación y, aunque sepan de antemano que lo que se van a encontrar en el establecimiento que regenta el chef madrileño en el hotel NH Eurobuilding dista mucho de lo que se suele encontrar en cualquier otro restaurante, Muñoz considera que no es necesario ninguna dosis extra de atrevimiento: «Basta con que les guste comer de verdad. Que les guste comer de todo, los sabores intensos…»
Y sobre todo, las sorpresas. David no entiende la alta cocina sin cierto desconcierto.«Es cocina de vanguardia, y la vanguardia siempre tiene que abrir un camino que no se ha abierto antes. Y en consecuencia, la sorpresa se va a generar sí o sí». Por eso, cuando habla de lo que uno se debe encontrar cuando visita un restaurante de este tipo es la misma sensación que tiene al abrir un regalo. No sabes lo que te vas a encontrar, pero estás nervioso porque sabes que te va a gustar».
La labor de los cocineros es esencial a la hora de ser capaces de ofrecer esta experiencia multisensorial a través de todo lo que rodea al acto de comer . Pero lejos de considerarlos y considerarse un artista, David prefiere referirse a sí mismo y al resto de sus colegas como artesanos: «Es cierto que hay una labor de creación 100% creativa y artística al comienzo del proceso, a la hora de concebir el plato, pero es una pequeña parte de su labor. El grueso de su día a día es más una labor artesanal. No creo que el cocinero sea un artista, aunque sí es cierto que su labor está muy vinculada a la creatividad».
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*Yorokobu es medio colaborador