¿De qué sirve un zapato para escribir una palabra?; ¿qué tiene que ver un vocablo japonés con una calavera?; ¿cuántas personas hacen falta para formar un B?; ¿pueden un moledor de chocolate y un exprimidor de limones a medio metro de distancia el uno del otro convertirse en una K si se les mira desde cierta perspectiva?
Nos hemos quedado alucinados con la creatividad de la gente que pasó durante tres días (13, 14 y 15 de agosto) por el stand de Yorokobu América en la Semana del Emprendedor de México. Prometimos cambiar inspiraciones por un año de suscripción gratuita a nuestra revista impresa, y ahora se nos hace injusto solo poder repartir cinco.
México tiene la creatividad a flor de piel y nos lo demostraron las decenas y decenas de participantes que a través de ilustraciones, creaciones digitales, composiciones con objetos y microtextos quisieron hacer en nuestra mesa su propia versión de la portada mexicana de Yorokobu. A todos ellos, un GRACIAS del tamaño del Zócalo.
Un jurado compuesto por los diseñadores y editores de nuestra revista elegirá las cinco creaciones más originales y sus autores recibirán gratis nuestra publicación mensual impresa durante el próximo año enterito. Los ganadores serán anunciados a mediados de septiembre en nuestras nuevas redes sociales de Facebook y Twitter en América.
Estamos haciendo lo impracticable por abrir la posibilidad de suscripción a la revista en papel a todo el mundo en México y otros países de Latinoamérica; mientras tanto, remitimos a nuestro público de fuera de España (que crece y crece sin parar) a nuestro blog. Puede ser buena forma de sobrellevar la espera 🙂
Y sin demorarnos más, a lo que íbamos: ¿Quieres saber qué respondió la gente a nuestra pregunta de ‘¿Cómo pondrías Yorokobu en mexicano?’ He aquí la respuesta.
Así se expresa Yorokobu en objetos (o no tan objetos)
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Esto dijeron los más pintones
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Esto se les ocurrió a los artistas tecnológicos
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Hasta hubo quien se animó a pintar Yorokobu en palabras
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* (Los cinco premios no están diferenciados por categorías. Todas las creaciones compiten entre sí)