Si somos estrictamente rigurosos: no es tan fácil. Hay rachas, claro, hay rachas. Tampoco es que no besemos nunca el santo. Pero que ni solteros ni solteras, ni casados ni casadas me vengan a jurar que se pasan el día dale que te pego. ¡A la hoguera con ellos si es así! Por envidia insana, y porque no es cierto.
Bravo que los hispanos hayamos pillado fama interplanetaria por nuestro savoir faire horizontal. Olé nuestros huevos -y nuestros ovarios-, claro está. Pero eso, entre nosotros, siendo sinceros, no quiere decir que por estos lares nos pasemos la vida practicando. A veces hay vacas gordas, y a veces no, y eso se sabe de Lima a la albufera valenciana. Ahora, una cosa no nos la quita nadie, ¿decirlo?…. ¡vaya! ¿Qué idioma podría pavonearse como el nuestro de nombrar de tantas maneras una relación sexual? En español, vayas donde vayas, con mayor o menor elegancia, siempre habrá alguien dispuesto a enseñarte otras maneras de ‘coger’. A contarte, por puro enriquecimiento lingüístico, las mil y una formas en las que sabemos follar.
Partamos de que en cualquiera de nuestros países las expresiones bonitas, por bonitas, bonitas, son cosas como hacer el amor, encamarse o intimar. Con esas te libras de sonar desagradable o atrevido/a y todo el mundo entenderá. Y ahora que levante la mano el que cuando está entre amigos o amigas utiliza las mismas locuciones. ¡ja!
En España follamos, mayormente. También jodemos, echamos kikis, polvos, plantamos una pica en Flandes, tiramos, fornicamos, metemos, tricotamos, nos damos revolcones, zumbamos, ponemos un clavo, limpiamos el sable, nos damos un meneíto, chichamos, pasamos por la piedra, mojamos, nos comemos colines e incluso chingamos, cuando nos dejan. *(quilar, kilar, mandarsele/la, chuscar, pinchar, empujar, triscar, echar un pinchito, repellar, frungir, hacer la caidita de Roma, rostollar)
En Mexico se coge, como en toda América Latina. Aunque aquí también parchan, planchan, echan palo, arriman, clavan, cochan, hacen que cante la rana, dan pa´ las tunas y lo que más les gusta: chingar.
En América Central no se remilgan tampoco:
Guatelama coge, pisa y chima;
En El Salvador pisan, mojan, comen pollo y hasta meten la cara de gato;
Para Honduras: echar palitos, coger o pisar;
Igual en Nicaragua cogen y pisan;
Costa Rica, que es muy cálida, tiene una riqueza lingüística que empieza por coger y acaba por culear. Aunque entre tanto echan un polvo, mojan la sardina, corren la persiana, arriman el mueble, apuñalan al oso y vuelan la matraca;
Panamá se lo culea o se la echa; *(dar lerna)
Y se dice que en Cuba no paran de singar; *(entubar, meter tuberia. echar un palo, pasarla por la lija, pasar por la piedra, formar gozadera, romper el colchon, irse de Cuchi-cuchi, fokear)
En Puerto Rico, al más puro gringo style, el que no coge se lo monta con el verbo to fuck
Y en República Dominicana lo que les da más gustito si no están singando es rapar.
Turno para los Sudamericanos:
Venezuela…, ay Venezuela. En ese acento suena bonito lo que te digan. Ya te pueden tirar, singar o fornicar, que les puede dar por comerse un lomito, echar un polvo, medir el aceite, pasarte por el filo, echar una revolcada, mojar la canoa, clavarse a alguien o darle a la gata de comer. Dicen que mejor que andar repitiendo sus vocablos, es que te manden callar para demostrártelos.
En Colombia también hay Caribe. Ahí quien no picha, tira; quien no echa un polvo, culea y está a quien tímidamente le gusta meter el colgoncito. *(comerse, castigar el cuero, moteliar)
En Ecuador también cogen, culean;
Y en Perú, para no ser menos, igual se echan un polvo, que cachan, que les da por tirar;
Bolivia kaska y tira;
En Paraguay garchan, cogen y kunu’u –que es como lo hacen los que se encaman en guaraní-
¿Y Chile?, Allí no es culear sino culiar. Aunque también cogen, se dan duro y se echan una cacha o cachita a la hora de fornicar. *(mandarla a guardar, remojar la nutria)
Argentina, papel y boli: garchar, vacunar, fifar, ensartar, cepillar, empomarse, clavar, dar matraca, curtir, hacer un pibe (a una mujer), meter la chaucha, mojar el bizcocho, dar masita, enterrar la batata, ponerla y fuchicar. *(echarse un polvo. moverse a alguien, empernar, dar)
Uruguay hace todas esas mismas. Será por modos.
Y en la africana Guinea Ecuatorial, lo mismo francofonizan el baiser, que foden en luso que se descocan en castellano por españolizar la cosa.
Así está el tema, -con perdón a los lectores más recatados-. Para el resto, el artículo queda abierto por si alguien quiere introducir alguna fórmula nueva. A quien le apetezca, que la meta con toda confianza, faltaría más.
*(Tras los asteriscos están las fórmulas que han aportado los lectores de cada país. ¿te apuntas a la orgía filológica?)