Hace un año muchos carriles bici londinenses se pintaron de azul. Era el color de Barclays. La marca presentaba una iniciativa llamada Cycle Superhighways que consistía en crear vías rápidas y seguras para ir desde las afueras de Londres al centro de la ciudad, y colocar señales que indicaban la distancia de un lugar a otro medido en tiempo pedaleando.
El propósito de la compañía es que los londinenses aumenten el uso de la bici en un 400% respecto a las cifras del año 2000, según datos de la entidad financiera.
Y para eso, además, crearon, junto a Transport for London, un sistema de uso público de bicicletas. Los ciudadanos, al adquirir un abono de Barclays Cycle Hire o realizar un pago por uso, pueden utilizar bicis que recogen y dejan en ciertos puntos de la ciudad.
Dentro de esta iniciativa, Barclays acaba de presentar una guía animada para promover la seguridad en el uso de la bici por rutas urbanas.
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