Categorías
Entretenimiento

Sexo chungo, rotondas en Murcia y pantalones cagados

El funcionamiento del colisionador de hadrones de Suiza es un misterio para todo aquel que no haya alcanzando ‘Nivel Goku’ en algo relacionado con la física de partículas. La moraleja de la historia es que existen múltiples parcelas del conocimiento que, a pesar de ser totalmente desconocidas para el ciudadano medio, son decididamente trascendentes para explicar el mundo que nos rodea.
En ese escenario es donde tiene sentido Strambotic, el libro de Iñaki Berazaluce y Daniel Civantos que cuenta un buen número de historias asombrosas sin las cuales la realidad en la que estamos inmersos no tendría ningún sentido.

El origen de Strambotic se sitúa en internet, donde Berazaluce y Civantos llevaban siete años publicando estas historias en diferentes medios (como Yorokobu) pero, sobre todo, en el sitio web del mismo nombre: Strambotic. Dado que el fin de todo ser humanos es que o su cuerpo o sus ideas trasciendan y perduren, los autores se pusieron manos a la obra. «Llevamos varios miles de artículos en el blog, así que lo que nos tocaba era una labor de zapa y selección. El criterio fundamental era que fuese perdurable. Al fin y al cabo, los post en internet están condenados a perderse como lágrimas en la lluvia y, mientras, sus reencarnaciones en papel perdurarán tanto o más que el código de Hamurabi», explica Iñaki Berazaluce.
La misión de arrojar luz al mundo comenzó, en realidad, a finales del siglo XX (¡qué tiempos aquellos!) con el webzine Sontone.com. Cuentan los autores que  «siguieron con el Desternillablog, en 20 Minutos, Mundo Insólito, en El País, y Strambotic en su doble encarnación: la declinante Info punto com y Público, donde ahora refulge con primor». Y he aquí el hijo de todas esas encarnaciones digitales.

El libro está estructurado en seis categorías que van desde el arte al sexo chungo pasando por la publicidad, el cine o la idiosincrasia identitaria de los pueblos, que es algo que llena de trascendencia las mentes. Responde a un buen número de cuestiones que han constituido un reto para el conocimiento humano durante siglos. ¿Cuántas hostias tendrías que engullir para comerte un Jesucristo entero? ¿Cómo dicen los cubanos ‘hacer una cubana’? ¿De dónde viene la moda de los pantalones cagados? Son todas cuestiones que, por fin, se abordan de una manera decidida y valiente.
Desde un punto vista analítico, Strambotic también es una radiografía descarnada del quilombo social y cultural al que llamamos España. El volumen investiga acerca de temas capitales como lo feas que son las rotondas en la Comunidad de Murcia, de las maneras para deshacerse del peinado borroka y reintegrarse en la sociedad con normalidad, de algunas de las más aguerridas teorías de la conspiración que manejamos por estos lares o, saliendo de nuestras fronteras, una secta rusa adoradora de San Francisco Franco.

Además de los temas que han ido sembrando durante estos siete años, Berazaluce y Civantos han barnizado los contenidos actualizándolos con sus experiencias en su Primera Gira Estrambótica, un tour invernal que les llevó a recorrer casi todo el arco mediterráneo. «Fuimos de Cádiz a Benidorm, Andalucía y La Mancha, visitando algunos de los lugares emblemáticos del estrambotismo español. Del Casa Pepe de Despeñaperros al Bar de María Jesús y su Acordeón, pasando por el Palmar de Troya, el far west del desierto de Almería o el pecio de Torremolinos», narra Berazaluce.

La presentación del libro en Madrid será el próximo 23 de septiembre, a las 19.30h en la librería Tipos Infames. Los autores aseguran que habrá kalimotxo y un show del cómico Manuel Burque.

 
 

Por David García

David García es periodista y dedica su tiempo a escribir cosas, contar cosas y pensar en cosas para todos los proyectos de Brands and Roses (empresa de contenidos que edita Yorokobu y mil proyectos más).

Es redactor jefe en la revista de interiorismo C-Top que Brands and Roses hace para Cosentino, escribe en Yorokobu, Ling, trabajó en un videoclub en los 90, que es una cosa que curte mucho, y suele echar de menos el mar en las tardes de invierno.

También contó cosas en Antes de que Sea Tarde (Cadena SER); enseñó a las familias la única fe verdadera que existe (la del rock) en su cosa llamada Top of the Class y otro tipo de cosas que, podríamos decir, le convierten en cosista.

Salir de la versión móvil