โEl culo data de la mรกs remota antigรผedad. Apareciรณ cuando a los hombres se les ocurriรณ alzarse sobre sus patas traseras y sostenerse asรญ. Fue un momento capital de nuestra evoluciรณn, ya que los mรบsculos glรบteos se desarrollaron entonces de un modo considerableโ, comienza el ensayo provocador de Jean-Luc Hennig Breve historia del culo.
El escritor francรฉs no pierde el tiempo para entrar en materia en un libro de mรกs de 200 pรกginas que repasa el simbolismo histรณrico del trasero, empezando por su origen milenario. โDe las 193 especies vivientes de primates, solamente la especie humana posee unas nalgas hemisfรฉricas que son permanentemente salientes, aunque algunos hayan podido argรผir que ese tipo de nalgas se encuentran tambiรฉn en las llamas de los Andes. Comparados con los humanos, los chimpancรฉs se han descrito como โmonos de culo planoโ, lo que mรกs bien es lo contrario de lo que consideramos un culo. Asรญ pues, el nacimiento del culo coincide con la posiciรณn erguida y la marcha bรญpeda, lo que, segรบn Yves Coppens, se remontarรญa a tres o cuatro millones de aรฑosโ, explica en el primer capรญtulo.
โRecientemente, se ha postulado otra hipรณtesis: el australopiteco no serรญa mรกs que un gran mono cuyo desarrollo se vio perturbado y frenado por la mutaciรณn de un gen. El agujero occipital que une el cerebro a la columna vertebral seguirรญa fijado a la base del crรกneo. Los mรบsculos habrรญan modelado entonces las formas รณseas y la pelvis se habrรญa redondeadoโ.

โLucy, la Australopitecus mรกs cรฉlebre que conocemos, descubierta en 1974 en el Afar etรญope, viviรณ hace tres millones de aรฑos. Nos permite hacernos una idea general de quienes tuvieron el privilegio de ostentar los primeros culos del mundo. De todas formas, cabe precisar que Lucy solo tenรญa un culo ocasional: seguรญa trepando a los รกrboles para alimentarse, dormir y escapar de los depredadores y, naturalmente, para trepar metรญa el culo hacia adentro. Dado que, como es evidente, no se ha encontrado mรกs que su esqueleto, nos cuesta hacernos una idea del estado de su culo, pero podemos aventurar que se parecรญa bastante a la nuez de cocoโ.
Todavรญa quedaban muchos aรฑos de evoluciรณn, segรบn el pensador francรฉs, para que se formaran las facciones que hoy conocemos como culo. โEntre el culo intermitente del Homo habilis y el culo definitivo del Homo erectus hubo que esperar todavรญa cosa de un millรณn de aรฑosโ.
โDespuรฉs de leer Breve historia del culo, nunca volverรก a sentarse como antesโ, comentรณ Andrรฉ Rollin de Le Canard Enchaรฎnรฉ tras leer el ensayo de Jean-Luc Hennig. Aquรญ, un pequeรฑo resumen para que juzguen ustedes mismos.
ยฟSatรกn tenรญa culo?

Histรณricamente, los estudiosos de religiรณn han debatido a fondo si Satรกn poseรญa unas nalgas humanas o no. โEn el siglo XIII, por la misma รฉpoca en la que ofrecรญa su trasero en tรญmpanos, sillerรญas y capiteles de iglesias, Caesarius of Heisterbach hacรญa decir a los demonios que no tenรญan culo cuando adoptaban forma humana, lo que es aรบn es mรกs extraรฑo si se tiene en cuenta que se ha encontrado la huella de su trasero en Moisdon-la Riviรจre, capital del cantรณn de Loire Atlantiqueโ.
โBastase con mostrar el culo a Satรกn para recordarle su carencia y obligarle a desviar la mirada. Una estratagema que utilizรณ con frecuencia Lutero, quien creรญa que el demonio le atormentaba. En 1532, escribe en sus Propos de table: โAnoche, el diablo, discutiendo conmigo, me acusaba de ser un ladrรณn, de haber despojado al papa (โฆ)โโ.
Ante tal desafรญo del diablo Lutero le hizo frente con un contundente: โChรบpame el culoโ, le respondรญ, y se callรณโ.
โEn el jardรญn de las delicias de Jerรณnimo Bosch, un espejo de acero recubre tambiรฉn el culo de un personaje monstruoso que repta bajo el trono de Santรกn, mientras que una mujer con los brazos colgantes y un sapo entre los senos desfallece ante su imagen confusa. Asรญ es que no se puede dudar ni de la existencia del culo del diablo ni de la malignidad de los espejosโ.
La cirugรญa
Hay quien busca recurrir a la cirugรญa para moldear las nalgas. โAlgunas mujeres, preocupadas por su perfil, se hacen remodelar un culo que consideran voluminoso con la tรฉcnica de la liposucciรณn, que consiste en eliminar la grasa profunda mediante aspiraciรณn y con la ayuda de cรกnulas finas como pajas. Las mujeres son, sobre todo, aunque no exclusivamente, las que recurren a la liposucciรณn para modelar el trasero de sus sueรฑosโ.
[pullquote align=ยปrightยป]ยปNuestro culo nos pertenece y no se le encontrarรก nunca en otro sitio. Es un aliado lealโ[/pullquote]
Es uno de los procedimientos mรกs complicados de la cirugรญa plรกstica. โLos culos que se ponen a disposiciรณn del bisturรญ no estรกn a salvo de enojosos accidentes. La tรฉcnica de implantar silicona es de las mรกs delicadas, y en algunas mujeres, al sentarse, se ve cรณmo, de repente, sus nalgas parten hacia sus muslos. Tienen, en lugar de culo, unas pistoleras bastante comprometedoras. Es lo que, en tรฉrminos mรฉdicos, se llama una โmigraciรณn de la siliconaโ o, mรกs llanamente, un corrimiento de culo, lo que es cargante ya que el culo continรบa tal cual, pero no donde se le esperabaโ.
Durante la Tercera Repรบblica francesa se puso de moda una especie de culo postizo que ensalzaba las caderas de las mujeres de la รฉpoca que lo llevaban. โAflorรณ un culo increรญble y bastante suntuoso que recordaba al culo prehistรณrico. Aunque fuese totalmente artificial, se llamรณ โmiriรฑaqueโ, โgloboโ o, sin mรกs โfalso culoโ.
Pero por mucho que uno recurra a la cirugรญa, Hennig es tajante sobre esta extremidad del cuerpo: โel culo no puede ser recuperado, como el corazรณn o los riรฑones, y vivir en otro cuerpo. Nuestro culo nos pertenece y no se le encontrarรก nunca en otro sitio. Es un aliado lealโ.
El culo es solo del humano (y del mono)

Guglielmo Plรผschow Lic. Dominio Pรบblico
En el capรญtulo de Grupa, Hennig se pregunta si los animales realmente tienen culo. โNadie niega que no tengan ano pero ยฟculo? Veamos lo que dice Buffon, en su Historia natural (1749-1789): โLas nalgas, que son las partes mรกs inferiores del trono, sรณlo pertenecen a la especia humana; ninguno de los animales cuadrรบpedos tiene nalgas, lo que se toma por tales con sus muslosโโ.
โPara Littrรฉ, en su Dictionnaire de la langue franรงaise (1863-1872), el culo es propio del hombre y del mono (โฆ). Y para Pierre Larousse, se puede aceptar perfectamente que un caballo o un buey tengan culo; por otra parte, aรฑade, la belleza de un culo animal reside en su longitud, su desarrollo y la firmeza de los mรบsculos. Dicho esto, podemos preguntarnos por quรฉ los caballos tienen nalgas tan opulentas, a pesar de que, en su caso, la postura vertical no sea muy corrienteโ.
Aun asรญ, el pensador francรฉs dice que histรณricamente hay pensadores y cientรญficos que asignaron estas caracterรญsticas a un animal. โQuizรก sea inรบtil buscar con tanta obstinaciรณn el culo en los animales cuando todo el mundo estรก de acuerdo, desde el siglo XI, en asignarlas una grupa, es decir, un trasero en forma de bocio, joroba o panza, lo cual no es especialmente favorecedorโ.
Canibalismo
Cuando Issei Sagawa matรณ y despedazรณ a una estudiante holandesa en 1981, unos aรฑos mรกs tarde en una entrevista confesรณ que el culo era la parte del cuerpo femenino que mรกs le fascinaba.
โEmpecรฉ por la nalga derecha. Mordรญ en el sitio mรกs carnoso. Pero no conseguรญa arrancar ni un trozo. Me dolรญa muchรญsimo la mandibula de tanto intentarlo, asรญ que fui a buscar un chuchillo a la cocina. (โฆ) Nunca hubiera imaginado que la piel humana pudiera ser tan dura. Entonces me hice con un cuchillo mรกs largo, un cuchillo de carne, que conseguรญ clavar. Intentรฉ cortar un trozo, y no habรญa sangre en absoluto. Simplemente vi unas cosas amarillas, como espigas de maรญz. Estaba verdaderamente asombrado, porque pensaba que cuando se corta un culo la carne aparece inmediatamente. Pero ยกquรฉ va!, lo que aparece es grasa, grasa muy espesa. Cortaba y cortaba y no acababa de encontrar la carne. Finalmente, despuรฉs de haber separado casi todo, encontrรฉ unas cosas rojas y me las comรญ. Como estaban muy ricas, comรญ bastanteโ.

โCon la danza, el culo estรก por fin contento de ser culoโ
La danza ensalza el culo e introduce vida a las nalgas, en opiniรณn del escritor francรฉs. โCon la danza se acabรณ el culo tristรณn sin energรญa ni perspectivas en la vida. Porque la danza crea en el culo algo prodigioso: el meneo. El meneo es un movimiento brusco que estremece el culo, provocรกndoles sacudidas, trepidaciones e incluso choques sรญsmicos. El meneo es algo asรญ como la tormenta del culo. En resumen, con la danza, el culo estรก por fin contento de ser culoโ.
La Iglesia no tardรณ en darse cuenta de los poderes que poseรญan unas nalgas sometidas al baile. โEn un concilio, reunido en Parรญs en 1212, considerรณ que era mรกs pecaminoso bailar que trabajar la tierra un domingo, ya que el baile es โla cerilla que prende la lujuriaโโ.
Mรกs recientemente, en la dรฉcada de los 80 en Senegal se creรณ una danza en la que el culo es el protagonista. โSe llama el ventilador. Basta con agacharse, apoyarse en las dos rodillas dobladas, levantar un poco la cabeza, arquear la espalda y seguir el ritmo del tema, el pequeรฑo tambor. Se mueven los riรฑones y el culo a sacudidas, como las rotaciones de un ventiladorโ.
El piercing
Perforar el culo, como se hace frecuentemente en la lengua, labios o la oreja, no es algo comรบn. Pero siempre hay personas dispuestas a hacerlo para destacar sobre los demรกs.
โBruno, uno de los tatuadores mรกs cรฉlebres de Parรญs, cita tambiรฉn a una cliente que querรญa que le pusieran dos anillos de oro en la punta de los senos y, como tenรญa el clรญtoris bastante desarrollado, que se le fijase allรญ una cadenilla de oro, lastrada en su extremidad por una pieza de plomo en forma de aceituna. Para completar su equipamiento, decidiรณ fijarse otros dos anillos en los labios de la vulva โy engarzar en el recto una espiral de oro unida a una cadena que saliera libremente por el ano y terminara en un mosquetรณnโ.
El tatuaje, en cambio, sรญ fija sus agujas frecuentemente sobre el culo. Cuando la expediciรณn del Capitรกn Cook llegรณ a Tahitรญ encontraron un pueblo nativo repleto de tatuajes. โHay tal variedad en los modelos representados que su nรบmero y su ubicaciรณn parecen depender enteramente de la fantasรญa de cada persona. Pero todos estรกn de acuerdo en llevar el trasero enteramente negroโ.
De hecho, el autor comenta que la palabra tatuaje proviene โdel tahitaiano tatau, onomatopeya que indica la realizaciรณn de incisiones en la piel a base de golpecitos repetidosโ.
En la รฉpoca de la esclavitud, marcar el culo con incisiones irreversibles era una prรกctica comรบn. Como si de un animal se tratara, el calor del metal se utilizaba para imprimir signos sobre el trasero de los esclavos africanos que permitiera reconocerles en caso de fuga. โSe utilizaba una delgada lรกmina de plata -cuenta el padre Labar-. Se calienta. Se marca con sebo el lugar donde se quiere aplicar. Se pone encima un papel untado con grasa o aceite y se aplica ligeramente la lรกmina. La carne se hincha, las letras aparecen en relieve y no se borran nuncaโ.
Azotar

El culo y el azote han tenido siempre โuna intensa atracciรณn mutua. Incluso podrรญamos hablar de flechazo. En efecto, ยฟquรฉ hay que sea mรกs tierno, mรกs pasivo, mรกs ciegamente confiado, mรกs consagrado a los golpes y a la oscura abnegaciรณn que el culo? En el fondo, la azotaina es al culo lo que la bofetada a la mejillaโ, defiende Hennig.
โLa proximidad entre las mejillas y el culo estรก lejos de ser fortuita; a menudo se confunden al admirarlos. A propรณsito de unos mofletes redondeados, se puede hablar de โmofletes como culitosโ y, a la inversa, tambiรฉn se habla de un buen culo mofletudo o de un culo abofeteableโ.
Histรณricamente, seรฑala Hennig, azotar era algo que proporcionaba placer a quien lo administraba. Se usaba para humillar al mรกs dรฉbil y para someter a la poblaciรณn. Durante el terror, โThรฉroigne de Mรฉricourt fue azotada a conciencia, en 1793, en el patio de los Bernardos, en las Tullerรญas, por โarpรญas jacobinasโโ.
En estos eventos de escarnio pรบblico habรญa gente que acudรญa para โregodearse e incluso para hacer el obsceno inventario de todos los culos acumulados (โฆ) Las Recolectas de la calle del Bac presentaron sesenta culos resecos y amarillentos; parecรญan calabazas podridasโ.
La nociรณn de que el que recibe un azote en el culo tambiรฉn podrรญa disfrutarlo es un constructo moderno โque aparentemente data del siglo XVIIIโ, segรบn Hennig.
Concretamente, el escritor atribuye este cambio de actitud a Rousseau, a quien debemos el โrelato de la primera zurra placentera. Sucediรณ en 1723. รl tenรญa por entonces 11 aรฑos y vivรญa en Bossey, cerca de Ginebra, en casa del pastor Lammbercier, cuando un dรญa la hija del pastor le pegรณ unos azotes. Curiosamente, tras el castigo, quiso aรบn mรกs a quien lo habรญa impuesto. โHabรญa encontrado en el dolor -escribe (Confesiones, I)-, en la misma vergรผenza, una especie de sensualidad que me habรญa provocado mรกs deseo que temor de probarlo de nuevo por la misma manoโโ.
En ese mismo texto dice que la situaciรณn marcรณ al filรณsofo de por vida. โEstar de rodillas ante un ama imperiosa, obedecer sus ordenes, suplicarle su perdรณn, eran para mรญ exquisitos goces, y cuanto mรกs me inflamaba la sangre mi viva imaginaciรณn, mรกs adquirรญa el aspecto de un amante transidoโ.
El Sumo y el culo
โEs en el momento del combate cuando el culo es mรกs imponente, cuando los dos adversarios estรกn frente a frente, con sus enormes posaderas al aire y se observan un momento antes de que sus dos masas de carne se peleenโ.
Las gigantescas nalgas de los luchadores de sumo son fruto de un entrenamiento extremo que concentra la mayor parte de su peso y fuerza โen el estรณmago y las caderas, donde reside toda su fuerza de empuje y resistencia al adversarioโ, destaca Hennig.

Para conseguir esta forma fรญsica y un peso entre 180 y 250 kilos, โduermen catorce horas diarias e ingurgitan durante meses una espesa sopa a base de pescado, pollo, buey y una docena de huevos todo ello mezclado con purรฉ de habas y acompaรฑado por una salsa azucarada de soja: el chanko nabe. Lo rematan con cajas de cerveza Sapporo y sake caliente. El culo sumotori es un culo artificial, engordado a la fuerza, como antaรฑo se hacรญa con las ocas galas cuyo hรญgado degustaban los romanos, y su esperanza de vida es limitada. A los 50 o 55 aรฑos, se acabรณ. La tensiรณn arterial, el colesterol y la diabetes los acechanโ.
En Mauritania tambiรฉn hubo en el pasado personas dedicadas a hacer crecer el trasero de las mujeres pero con otro propรณsito. โExistieron durante mucho tiempo casas de engorde, con una corporaciรณn de cebadoras destinadas a volver obesas a las jรณvenes destinadas al matrimonio: โpara ser una mujer de calidad -decรญan- hace falta ser una mujer de cantidadโโ.
La sodomรญa
โFueron los libertinos del siglo XVIII, y Sade en especial, los que permitieron que, por primera vez en Francia, la sodomรญa saliera de siglos de clandestinidad y se convirtiera en un argumento filosรณfico. Porque la รฉpoca idolatraba al culo y Sade no escapรณ, ni mucho menos, al fetichismo culeroโ, explica el pensador francรฉs.
โEn Sade no hay striptease. No hay mรกs que el โยกArremรกnguese!โ brutal mediante el que el libertino ordena al culo que se ponga en posiciรณn de ser admirado. Con una sola excepciรณn, la del joven Rose, conducido a casa de Saint -Fond: โSรกcamele el calzรณn, Juliette, sรบbele la camisa hasta los riรฑones, dejando que el calzรณn caiga agradablemente; me gusta con locura esa manera de ofrecer un culo. El culo es inmediatamente entregado โaquรญ estรก mi culo, ยกcogedlo todos!, gritaba la putaโโ.
El placer de mirar el culo
Una de las grandes ventajas del culo es que es fรกcil admirarlo sin ser visto por la persona que lo posee. โEl placer de mirar el culo tiene lugar a escondidas de la mirada del otro, y procede precisamente de que podrรญa verte. Es cierto que a veces el placer se acrecienta cuando el otro sabe que le ves, como ocurre en algunos juegos de espejos bastante complicados. El culo y la mirada siempre juegan al esconditeโ.

Por eso se pregunta Hennig si esa es su principal funciรณn: โatraer la mirada voyeur, cuya mรกxima preocupaciรณn es siempre la de sisar, atrapar al vuelo, arramblar mediante la indiscreciรณnโ.
โAl contrario que el seno, la vagina o la verga, el culo es mucho mรกs accesible, se ofrece con toda ingenuidad, muchas veces para esconder el resto, sin prejuicios, ni complicaciones. Un culo no es gran cosa. Y el ojo mirรณn puede hoy birlar culos mรกs o menos como quiera, pulular de culo en culo, inconstante y frรญvoloโ.
