Los artículos de inspiración mencionan a Einstein o Los Beatles como ejemplos de fe en el propio talento. Recuerdan que los profesores de Einstein dijeron: «Este chico no llegará nunca a ningún sitio». Que un productor dijo de los músicos de Liverpool: «No me gusta como suenan». Con la perspectiva histórica nos reímos de estos juicios. ¿Quién se atreve hoy a cuestionar a Einstein o Los Beatles (excepto Quincy Jones)?
Quizá estos personajes no debieran ser inspiradores porque están fuera de toda duda. Quizá los referentes deberían ser figuras contemporáneas vituperadas por la crítica profesional y una parte del público.
Cualquier articulista encuentra más razones para odiar a Adam Sandler, Santiago Calatrava o Coldplay que para amarlos. ¿Por qué deben ser referentes? Algún lector estará tentado de comentar: «Porque si ellos pueden, yo también». Es una forma de verlo un tanto injusta. En una época en la que cuesta destacar, estos artistas han sabido diferenciarse del resto y mantener su actividad a pesar de las críticas. Gusten o no, son ejemplos de cómo continuar adelante frente a las opiniones en contra.
Santiago Calatrava o la perseverancia
Ximo Moltó (Octavi Pujades) artificiero de Cuerpo de Élite cuenta cómo desactivó un explosivo: «La bomba no explotó, pero el puente se derrumbó a la semana. Era de Calatrava».
Ningún puente de Calatrava se ha derrumbado, pero el chiste funciona. Los problemas sufridos por las construcciones del arquitecto español (generalmente por un deficiente mantenimiento) forman parte de la cultura popular. El humor funciona mejor cuanto más conocidas las referencias. (Esto explica el éxito de las series norteamericanas cuyo doblaje menciona a personajes y sucesos propios de nuestro país).
¿Por qué a pesar del descrédito popular es solicitado Calatrava para nuevas construcciones?
Calatrava sugiere un futuro brillante como en su día sugirió Steve Jobs con la tecnología. Las creaciones de uno y otro tienen luces y sombras, pero hay una diferencia importante. Un edificio para bien y para mal no puede ocultarse, pero una tecnología fallida cae en el olvido. A pesar de la crítica popular y de una parte de la prensa, Calatrava ha seguido arriesgando y construyendo obras que miran al futuro. Una prueba es el conjunto de rascacielos que ha diseñado recientemente para Greenwich (Londres). Recuerda a las ciudades relucientes de Guardianes de la Galaxia y Star Trek, de J.J. Abrams.
Coldplay o la apuesta por el término medio
La banda británica tiene 11 millones de seguidores en Youtube. Llena estadios. Sin embargo, películas y series tienen diálogos con referencias negativas a Coldplay.
La prensa especializada detesta a la banda. The Independent considera que «solo recibir un tiroteo en Afganistán es peor que el último disco de Coldplay». Para The New York Times es «la banda más insufrible de la última década». La crítica acusa a la banda de falta de ambición, de superficialidad y tibieza emocional. Estas críticas comenzaron a partid de Viva la vida, que fue el disco más vendido del mundo en 2008.
¿Por qué triunfa una banda vilipendiada por la crítica y los fanáticos musicales?
A los 80 millones de personas que escuchan a Coldplay no les importa la crítica. No buscan una exagerada exaltación de la vida ni una muestra de profunda desolación en la tragedia. No buscan letras que resuelvan los problemas de la vida. Coldplay lo tiene claro. Lo que para la crítica es tibieza, para Coldplay es una apuesta por la ligereza.
Adam Sandler y la fidelidad a sí mismo
Para Alan Moore el deber del artista es dar al público lo que necesita. Según la premisa, Adam Sandler cumple como artista. El público necesita risas. El cómico sabe cómo contentar a sus seguidores.
Netflix muestra datos: Los 6 ridículos es la película más vista en plataforma. Las producciones de Sandler acumularon en abril de 2017 un total de 500 millones de horas. Mientras tanto, una parte del público considera insufrible al actor.
¿Cómo es posible que el cómico más odiado sea a la vez el que más público atraiga?
Diderot dijo que el artista que quiere agradar a todos no es nada. Sandler agrada a su público de siempre con un humor no sofisticado y ajeno a la corrección política. (Es criticado como racista y machista). Si estas críticas existen, significa que sus detractores ven las películas del protagonista de 50 primeras citas.
Sandler demostró dotes dramáticas en Embriagado de amor (Punch Drunk Love) dirigida por Paul Thomas Anderson (Pozos de ambición, El hilo invisible). A pesar del éxito de crítica (excepto en España) y las nominaciones a los Globo de Oro, fue ignorada por el seguidor de Sandler.
Un razón del éxito del cómico es la coherencia de su carrera. Cuando nos disponemos a ver un Adam Sandler esperamos un determinado tipo de producción. Embriagado de amor es un Paul Thomas Anderson. El cómico tiene poder para dirigir su carrera a su antojo, pero ha decidido ser fiel a sí mismo y al público que lo aupó.
Lo de la «tibieza» de Coldplay no me parece, realmente casi todas sus canciones hablan sobre muchos problemas, muchas son tristes u otras más optimistas sobre la vida, algo que pienso de los que critican a Coldplay es que realmente no los han escuchado con atención