Unos crían la fama y otros cardan la lana
En tiempos de twitter, whatsapp y de los smartphones, aún quedan nostálgicos o quien sabe si iluminados que recuperan algo casi extinguido: el pastoreo. Pero no sólo es que enseñen un oficio a los jóvenes que regresan al campo, cada vez más numerosos, sino que además les compran la lana, la transforman y la venden convertida en mullidos jerseys o