Si son capaces de expedir un paquete de tabaco sin que medie ningún camarero o estanquero o de atendernos en un call center, ¿por qué no van a ser capaces de casarnos? Más o menos es la idea sobre la que se asienta AutoWed, la máquina que oficia bodas.
Ni jueces, ni sacerdotes, ni capitanes de barco. Basta introducir un dólar en AutoWed, seleccionar el tipo de boda (heterosexual, gay, lesbiana…) y la máquina se encarga de expedir un certificado de boda personalizado, los anillos para los contrayentes e, incluso, de poner la música de fondo si se desea. El precio incluye, además, un 10% de descuento para el posible divorcio.
La máquina, capaz de hacer sombra a las excéntricas bodas de Las Vegas, fue ideada por el grupo de diseñadores e ingenieros que conforman Concept Shed quienes han creado el prototipo para The Marvin’s Marvellous Mechanical Museum de Detroit.