Mientras Londres duerme, la ciudad se puebla de tipógrafos callejeros que retocan y dibujan la señalética en las calles. Lo sabemos gracias al británico Tom Williams que los capturó con su cámara mientras trabajaban sobre el asfalto en las inmediaciones de su casa.
Lo que podría parecer un oficio propio de máquinas, en realidad requiere una maña considerable que estos dos pintores realizan con sorprendente facilidad. Un palo es lo único que utilizan para garantizar unas líneas rectas y el trazo se hace a ojo con un resultado bastante decente. Una vez terminado el trabajo, los dos hombres prosiguen su camino, realizando sus pequeñas intervenciones mientras la mayor parte de los ciudadanos aún duermen en sus casas. (Visto en: Kottke)