Empieza la cuenta atrás. Quedan 64 días para el Día de la Música Heineken. En el Matadero de Madrid va a sonar música por sus cuatro costados. Sesenta bandas actuarán durante los días 18 y 19 de junio en un festival que, en su tercera edición, apuesta por la música de grupos emergentes y por el silencio en su impacto ambiental.
En cabeza de cartel, Vetusta Morla, The Pains of Being, Pure at Heart, Glasvegas, Janelle Monae y Russian Red. Entre el resto de grupos, Toro y Moi, Ellos, Yuck, Wild Beasts… El programa, desde las 11.15 de la mañana hasta pasada la media noche, y nunca coincidirán dos cabezas de cartel tocando a la misma hora.
“No traemos platos recalentados. Son primeras veces y primeras voces en la mayor parte de la programación. La novedad es nuestra razón de ser”, indicó esta mañana, en la presentación del festival, Enrique Calabuig, promotor Día de la Música Heineken.
El cartel “es una apuesta”, añadió. “Confiar en una propuesta entraña riesgos. Pero lo hacemos con una línea bien definida. Esta apuesta se consolida. Queremos dar a Madrid el festival que merece. Hay grupos muy emergentes. Los hemos seleccionado por su relevancia. Queremos darle envoltura promocional a bandas emergentes. Hay grupos nacionales e internacionales. Y será un festival urbano. Aquí no venimos de acampada”.
En esta ocasión la música no solo sonará en directo. Estará en una película que se empezará a grabar, a finales de mayo, cuando el equipo de la productora, Canadá, emprenda ruta por varias ciudades de España con diez bandas que tocarán en el Día de la Música Heineken. “Diez bandas, diez canciones y diez viajes”, indicó el director del documental, López Serrano. El estreno será el día 21, el Día Europeo de la Música, en el Teatro Circo Price.
“Vamos a hacer una película que refleje el espíritu del rock y de la gente que ama lo que hace. Es una película documental que seguirá un día en la ruta de 10 bandas que actuarán en el Día de la Música. Queremos dar a cada grupo un lugar acorde con su estilo. Pretendemos reflejar un trabajo en ruta, poner en escenas las canciones de los grupos en distintos sitios de la península. Queremos que la película sea una panorámica enérgica, intensa y veraz de lo que supone tocar, estar en ruta y tener una banda de rock and roll”, añadió.
Toda esta música va a movilizar a muchas personas, muchos equipos de producción, muchas cervezas, muchos decibelios… Y todo eso se puede medir en huella de carbono. La organización del festival no quiere que el Día de la Música se convierta en un ruido atroz en el medio ambiente.
“Nos preocupa el entorno y el medio ambiente”, enfatizó Eduardo Zaldivar, director de comunicación corporativa de Heineken España. “Es importante que el Día de la Música esté bañado de nuestra filosofía de contaminar lo menos posible y no hacer daño al medio ambiente. Esto no es barato. Hemos adoptado una serie de medidas innovadoras. Pero no vamos a decir nosotros lo verdes que somos. Lo que hacemos es validarlo. Vamos a hacer una auditoría para ver la huella de carbono y el impacto desde la cuna a la tumba. Lo vamos a enviar a tres organismos europeos que lo certifiquen”.
En ese plan está contemplada “una gestión eficiente de los recursos”, indicó. “Estamos encantados de que muchos festivales ya estén teniendo en cuenta el cuidado del medio ambiente. Vamos a intentar utilizar energías renovables. La iluminación de los escenarios requiere mucha energía y, por eso, vamos a utilizar equipos más eficientes”.
También se ha previsto un “plan de movilidad para los asistentes y los artistas. Para los primeros habrá transporte público y vamos a fomentar el uso de la bicicleta. Para los artistas vamos a utilizar coches eléctricos”.
El cartel de esta edición es de Gullermo Arias. El título es Hard to explain y ha sido seleccionado, en un concurso convocado por Heineken, entre mil propuestas.