En este hotel no habrá que dar los buenos días. El check-in se hará en una máquina y, a la salida, si el huésped quiere guardar su equipaje durante unas horas, le atenderá un brazo robótico llamado Yobot. Tomará la maleta, hará algunos giros y juegos con ella, y la situará en una de las 133 taquillas del hotel. ¿Y… eso de las piruetas? Mera diversión.
El hotel que aúna el lujo de un vuelo de primera clase y las cabinas de los hoteles-cápsula de Japón abrirá sus puertas el 1 de junio en Nueva York. Yotel es un alojamiento que se fundamenta en la unión de tecnología robótica, lujo y, a la vez, precios asequibles en el centro de la ciudad. En una metáfora, sería “el iPod de la industria de los hoteles”, según el fundador de la cadena YO!, Simon Woodroffe, y su CEO, Gerard Greene.
El cuarto hotel que abre esta cadena (y el primero en EEUU) tendrá 669 habitaciones. El espacio de las habitaciones se ha llevado al mínimo. La capacidad tecnológica del mobiliario y los servicios de atención al cliente se han llevado al máximo. El aprovechamiento del espacio se ha optimizado de tal forma que una mesa de trabajo preparada como conference room se convierte en una mesa de billar al darle la vuelta.
Rockwell Group ha diseñado este hotel. Las habitaciones están inspiradas en las cabinas de primera clase de las líneas aéreas, las duchas simulan la lluvia de monzón y la luz es en tonos violeta relajantes.
El primer Yotel se inauguró en Londres, en el interior del aeropuerto Gatwick, en el verano de 2007. El segundo abrió, a finales de ese mismo año, en la Terminal 4 de Heathrow y el tercero, en el aeropuerto Schiphol (Amsterdam), en septiembre del año siguiente.