Brendan Chilcutt no estรก dispuesto a vivir en un mundo en el que los niรฑos nunca hayan escuchado la sintonรญa de arranque de Windows 95 o el runrรบn de un cassette rebobinando. De ahรญ su empeรฑo por proteger los sonidos que le acompaรฑaron durante su infancia/juventud y que hoy prรกcticamente han desaparecido.
Su pasiรณn por los sonidos de los equipos electrรณnicos y la tecnologรญa de los 80 y 90 roza el fetichismo. Su forma de describir muchos de ellos le delata: โEl zumbido de una cinta VHS al ser arrastrada hacia el vientre de una JVC HR-7100 VCR del 83โฆ.โ
Por eso los รบltimos aรฑos se ha dedicado a recuperar muchos de ellos para crear su propio Museo de los Sonidos en Peligro de Extinciรณn.
La muestra digital es el refugio perfecto para aquellos a los que, de vez en cuando, les inunda la melancolรญa y necesitan retrotraerse a la era pre-banda ancha para recordar los chirridos del mรณdem de 56 ks, volver a disfrutar de las melodรญas monofรณnicas de los mรณviles de finales de los 90 o de las cancioncitas de los juegos de la Game Boy.
Chilcutt continuarรก recopilando sonidos hasta 2015. Despuรฉs, segรบn afirma, se centrarรก en el desarrollo de un lenguaje que le permita reinterpretar todos esos sonidos como una composiciรณn binaria.
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