Independizarse según Silicon Valley: un puñado de apps que te permitirán no levantarte del sofá

6 de noviembre de 2015
6 de noviembre de 2015
3 mins de lectura

Cuando uno abandona el nido, las tareas del hogar se convierten en todo un reto. Si bien las madres, a lo largo de su vida, instruyen a los hijos en el arte de hacer la cama, poner una lavadora, dejar la casa como los chorros del oro o cocinar, no siempre uno tiene tiempo de aplicar lo aprendido.
Lo saben los estudiantes y lo saben también los emprendedores. En Silicon Valley, un buen número de startups están aprovechando la falta de tiempo – y a veces ganas – de los jóvenes. ¿Su solución? Dejar las tareas del hogar en manos de una aplicación.
Para aquellos que al llegar a casa prefieren relajarse en el sofá y no leyendo una revista en la lavandería, Washio forma parte de las aplicaciones que se encargan de realizar la tarea por ellos. Basta con descargarse la app o registrarse en su web para contratar el servicio.
Los usuarios deberán seleccionar el día en que desean que alguien de Washio aterrice en su puerta, así como el servicio que querrían contratar. La compañía ofrece dos opciones: bien el lavado y planchado de todo el armario, o bien el lavado y planchado del uniforme casi oficial de muchos emprendedores, la camisa. Eso sí, deberán esperar a tener un buen cargamento de ropa, ya que la empresa exige, como mínimo, 6.8 kilos de vestuario y un pedido mínimo de 30 dólares (28 euros) – dependiendo de la prenda, varía el precio.

Pensada, según sus fundadores, para convertirse en el Uber de la colada, el negocio de Washio se basa en los acuerdos que posee la compañía con varias lavanderías de la zona. La empresa no solo presta el servicio en Los Ángeles y San Francisco. También ha logrado expandirse a otras ciudades como Boston, Washington o Chicago. ¿Su secreto? «La colada es una tarea que consume mucho tiempo, así que Washio les da tiempo libre para que se puedan concentrar en las cosas que más les gustan», explica Jordan Metzner, cofundador de la startup.
Con el reparto a domicilio también hacen negocio las aplicaciones pensadas para usuarios cansados de decidir qué cocinar. Como ocurre con la colada, muchos emprendedores pierden las ganas de ponerse delante de los fogones cuando llegan a casa después de un duro día de trabajo.
Pedir una pizza o comida china suelen ser buenas opciones, pero en Munchery prometen enviar platos elaborados por auténticos chefs. Creada en 2011, como sucede con otras apps de comida a domicilio de la zona de la bahía, Munchery cuenta con una plantilla de cocineros que elabora menús completos.

A la hora de seleccionar el pedido, cada menú va acompañado del nombre y la imagen de su creador, además de comentarios del resto de usuarios que lo han degustado. «Los chefs que contratamos para San Francisco y para Seattle y Nueva York tienen una larga experiencia en restaurantes de cocina elegante», afirma en una entrevista Tri Tran, cofundador de Munchery.
Con precios que rondan entre los 10 y 15 dólares (entre los 9 y 13 euros), la única tarea que tendrán que realizar los usuarios será calentar la cena en el microondas.
Pero más allá de hacer la colada o cocinar, existen aplicaciones que facilitan a los emprendedores otras tareas tan mundanas como preparar una mudanza, hacer la compra o incluso resolver la tarea de encontrar pareja (sin pasar por Tinder, que quita mucho tiempo).
TheLeagueAppMult
Considerada el Uber de las mudanzas, Lugg aspira a que los usuarios dejen de depender de un servicio tradicional de mudanzas y confíen sus muebles a los conductores registrados en la app que cuentan con un camión o una furgoneta. A pesar de ser algo caro – 32 euros el servicio más 2.25 euros por cada milla recorrida-, recibió hace poco 3.8 millones de dólares de financiación (3.48 millones de euros).
Por su parte, Instacart ofrece por 10 dólares (unos 9 euros) la entrega a domicilio de la compra que los usuarios hayan realizado en los establecimientos con los que la app tenga un acuerdo. Mientras tanto, The League ayuda a los exitosos emprendedores (o aspirantes a serlo) de Silicon Valley a encontrar su media naranja sin que lo sepan inversores o compañeros de trabajo, mostrando sus datos solo a las personas que más se ajustan a su perfil.
Facilidades en la palma de la mano para trabajadores con estrés que no tienen tiempo ni para hacer el vago. El objetivo: que no echen de menos a esas madres (o padres) que lo hacían todo por ellos antes de que se independizaran.
————-
Las imágenes de este artículo pertenecen a Washio y The League

No te pierdas...