La equiparación de posibilidades de todos los ciudadanos de un grupo social pasa, necesariamente, por la articulación de mecanismos de accesibilidad para aquellos que sufren de algún tipo de hándicap. Aunque resulte extraño, para disfrutar del diseño gráfico no hace falta ver. El FAD de Barcelona inaugura una exposición que aborda el tema del diseño inclusivo y la necesidad de ampliar el lenguaje actual para hacer que el diseño llegue sin trabas a quien no puede verlo.
La exposición, que abre sus puertas mañana, aborda las posibles evoluciones formales del alfabeto Braille a través de el ‘Manual de Tiflografía’, un compendio de los datos obtenidos en una de las partes más importantes de toda la investigación, las fases de prueba y evaluación de los símbolos confeccionados para el medio táctil. Por otro lado, la exposición mostrará una guía que recoge diversos ejemplos gráficos adaptados con fines pedagógicos e inclusivos.
Los responsables de este trabajo son Sonia Ciriza y Miguel Ayesa, diseñadores que comenzaron a hurgar de manera profunda en todo lo relativo al diseño inclusivo durante el proyecto que hicieron para terminar su carrera. «‘Hacia un diseño gráfico inclusivo’ nace como respuesta a la severa estandarización en la que se encuentran sumidos tanto el alfabeto Braille como la gran mayoría del material gráfico adaptado para lectores invidentes o con visión reducida», cuenta la propia Sonia Ciriza.
Los diseñadores se pusieron en manos de Xabier Armendáriz, invidente, que fue el encargado de evaluar el trabajo. Esta reivindicación de la democratización del diseño, de la transmisión de los mensajes independientemente de la capacidad sensorial del receptor de los mensajes, tiene como objetivo «plantear mecanismos que amplíen las posibilidades del diseño editorial dirigido a invidentes y personas con resto visual», cuenta Ciriza. «Asimismo, pretenden cubrir ese vacío existente en lo que a textos adaptados sobre la representación se refiere. De este modo, se ha creado una colección de libros con ilustraciones en relieve que, tomando como base la teoría de la representación del libro ‘Introducción a la Teoría de la Imagen’ de Justo Villafañe, tratan de introducir al lector en el contexto de la cultura visual contemporánea».
En España, la mayor carga de investigación en la disciplina está en manos de instituciones como la ONCE u ONGs como Design for All Foundation. «Además, podemos encontrar un buen número de diseñadores dedicados en parte o completamente al diseño inclusivo. En el plano internacional destacan los libros de corte minimalista, repletos de pop-ups y otros mecanismos de Katsumi Komagata titulados ‘Pliegues y Planes’ y ‘Las Hojas’. También es destacable el famoso ‘Libro Negro de los Colores’ diseñado por Menena Cottin y Rosana Faría que mediante braille e ilustraciones en relieve explica ciertas sinestesias vinculadas a los colores», resalta Ciriza.