La cabeza hinchable de Nicholas Cage en una jaula

Como Nicholas Cage en Leaving Las Vegas. Así debían andar en la agencia creativa Hungry Castle cuando decidieron emprender uno de esos proyectos que llevarían a cualquier otra persona en busca de ayuda profesional.
Cool Shit es la facción de esta organización que se ocupa de explorar las posibilidades creativas de la mandanga más rica de internet. Lo hicieron con el gran Lionel Richie. Lo hicieron con un gato que lanza rayos láser por sus ojos. Lo han hecho con Nick Cage. Han metido su cabeza en una jaula y la han convertido en una escultura interactiva. Cage in a cage.

Como explica Killian Cooper, uno de los ideólogos de esta locura, «queremos convertir imágenes de internet en tridimensionales para transformarlas ante vuestros propios ojos. Cool Shit es como internet pero en la vida real. Usamos la cultura pop de la red en todo nuestro arte y moda. ¡También lo hacemos porque es supergracioso!».
La cabeza de Nicholas Cage es un proyecto artístico-chanante que Hungry Castle ha ideado para presentarlo en el festival australiano Splendour in the Grass. De entre las dos expresiones que Cage puede articular, los creadores escogieron, claro, la que se convirtió en meme internetero. «Escogimos la cara del meme ‘You don’t say?’ que aparece en su película Vampire’s Kiss. Además, estamos invitando a la gente a cambiar su cara con la de Nicholas Cage. Todo lo que tienen que hacer es enviar una foto a cageface@hotmail.com».

Aunque ya sabíamos por su trayectoria que la cara de Nicholas Cage es rígida y dura (en el sentido literal del término), su capacidad para explotar infinitamente dos escasos gestos es también la inspiración para la resistencia y carácter lúdico que ofrece la cabeza hinchable de Cage. «Puede saltar sobre él, se le puede golpear o abrazarlo pero nunca se podrá romper Nicholas Cage. ¡Nunca!», asegura Cooper.
Para Hungry Castle, esta es su gran obra maestra. De hecho, Cooper dice que «si la cabeza de Lionel Riche era The Godfather, Nicolas Cage in a Cage será The Godfather Part II». Se trata además de una cabeza incapaz de hacer asomar el cartón, problema que sí tiene la auténtica y alopécica cabeza del sobrino de Francis Ford Coppola. Es todo tan bello que aún tememos que John Travolta esté detrás de todo y joda el plan.