De capturadores de pescado a capturadores de plástico. La comisaria de pesca de la Unión Europea Maria Damanaki cree haber dado con una solución para dar una nueva salida a pescadores en paro: utilizar su destreza en el mar para recoger plástico y desechos, según informa El País.
Además de proporcionar empleo y contribuir a limpiar el Mediterráneo, el plan, que no tiene ninguna validez legal, busca recuperar algunos de estos desechos para ser reciclados.
Según adelanta el artículo, ya existen redes diseñadas especialmente para la captura de este tipo de materiales en alta mar con el fin de ayudar a los marineros en su labor:
El País: «Las redes especiales necesarias para el objetivo cuestan entre 16.000 o 40.000 euros, según su tamaño (…) La nueva red es una adaptación de la concebida para controlar vertidos de crudo, que ahora cercará y capturará plásticos y otros objetos flotantes. ‘La red está totalmente hecha de plástico’, señala Alexandre Dangis, director de EuPC. ‘No captura peces y es 100% reciclable’. La malla es un invento de Thiery Thomazeau, un antiguo pescador francés, quien calcula que con ella se pueden recoger entre dos y ocho toneladas de desechos flotantes, en función del tamaño del aparejo».
Durante los próximos meses, se prevé lanzar un proyecto piloto en la Costa Azul.
El País: «El Mediterráneo, cuna de la civilización occidental, mar de tres continentes, se está convirtiendo lenta pero decididamente en un vertedero. El pasado verano, un estudio franco-belga estimó que sus aguas escondían 250.000 millones de pequeños objetos plásticos que del orden de 500 toneladas de plástico estaba ya disueltas entre las olas».
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Foto de Kevin Krejci reproducida bajo lic. CC
