En estos momentos el fuego avanza sin control por el Alt Empordà en la provincia de Girona. No es el primero que se produce este año en la Península Ibérica y es probable que no sea el último. Cuando las llamas desaparezcan habrá reproches y muchas acusaciones. Algunos intentarán sacar rédito político. Otros se indignarán señalando los recortes que se están aplicando en los servicios públicos y probablemente tendrán mucha razón. Pero vamos a intentar darle una vuelta a esta situación trágica. ¿Por qué no juntamos recursos e intentamos convertirnos en líderes mundiales en prevenir y apagar incendios?
Aquí van algunas ideas:
– Se integra el uso de plataformas de crowdsourcing como Ushaidi y Open Street Maps para ayudar en la respuesta a incendios, como ya se ha hecho en Haití, Rusia o Australia. Se forman profesionales en el cuerpo anti-incendios capaces de trabajar con estos datos que puedan comunicarse con los efectivos en el suelo. Personas afectadas por incendios pueden subir información a Ushaidi y Open Street Maps para que los bomberos tengan más datos en tiempo real.
– Se unifican todos los esfuerzos en una organización descentralizada que comparte toda la información y el conocimiento en una plataforma abierta. Aquí los profesionales de los departamentos anti-incendios intercambian ideas, técnicas de prevención y vídeos. Se fomentan vínculos con otros países para compartir información, protocolos de actuación y preparación.
– Se abre un laboratorio e incubadora para investigar nuevas soluciones anti-incendios. Aquí trabajan científicos, programadores y emprendedores.
– Atrae a los mejores expertos para que vengan a vivir y estudiar en España con incentivos especiales. Crea un nuevo organismo que englobe todos los centros existentes que se dedican a estudiar estos temas.
– Se abre un departamento de robótica que colabora con la Universidad de Tokio, Seúl y el MIT para crear tecnología que permita asistir la labor de los bomberos.
– Investigadores del instituto trabajan de cerca con Airbus para desarrollar y diseñar nuevas soluciones aéreas destinadas a luchar contra los incendios.
– El conocimiento y productos generados no solo sirven para luchar contra las llamas. Se convierten en herramientas fácilmente aplicables a terremotos, tsunamis, volcanes…
– Se trabaja sobre sustancias inocuas y biodegradables que puedan retardar las llamas.
– Se invierten más recursos en el estudio de estrategias de prevención y en crear protocolos de actuación y herramientas.
– Juntamos bomberos con artistas, programadores y diseñadores para pensar en nuevos métodos destinados a luchar contra incendios que complementen su trabajo actual. Se fomenta la colaboración entre ellos.
– España se convierte en líder mundial en prevención y apagado de fuegos. Australia, Indonesia, Rusia, Sudáfrica o Perú contratan los servicios de nuestros profesionales para hacer proyectos de consultoría y planes estratégicos. Dentro del organismo hay un grupo de expertos que se dedican a dar salida al mercado a inventos producidos en el laboratorio. Se crea una industria boyante que crea miles de puestos de trabajo.
Esta serie de ideas no pretende menospreciar a los increíbles profesionales que se juegan la vida ahora mismo. No se puede olvidar que muchas veces lo mejor es dejar que la política se quite de en medio y permita trabajar en paz a los profesionales. Pero ¿por qué no convertir el problema de los incendios en una oportunidad?
¿Y quién pagará todo esto? Sheldon Adelson, por supuesto.
—
Más información:
Techcrunch, Radar, Social Media in Emergency Situations, Russian Wildfires, Disasters and crowdsourcing
Foto: Fir0002 bajo licencia CC