Festivalet: la feria del consumo artesano, consciente y local

Metidos ya de lleno en estas  fechas de compras compulsivas y sorteos de lotería, los mercadillos y ferias de regalos proliferan por todo el país como las setas en otoño. Es época de consumo. Pero este puede ser responsable y buscar la calidad y la originalidad por encima de las prisas y los regalos de compromiso. Este es el sentido del Festivalet que se celebra en Barcelona el 13 y 14 de este mes en las instalaciones del Museu Marítim.



El evento es una feria independiente de productos hechos a mano o manufacturados a pequeña escala. La organizan Alicia Roselló y Elisa Riera, ambas diseñadoras, que fundaron la marca de tricot ilustrado Sirena con Jersey. Alicia, además, es fundadora de Duduá, «un espacio de talleres de labores 2.0 que desde hace 8 años trabaja para cambiar el chip de la gente sobre el tema de la artesanía y el hecho a mano, intentando modernizar las técnicas textiles tradicionales desde un punto de vista contemporáneo», explica a Yorokobu la propia Roselló.


«En el 2009 montamos la primera edición del Festivalet», cuentan, «para dar más visibilidad a diseñadores independientes y fomentar una forma de consumo más consciente y local». Este año cumplen su séptima edición.
Sin embargo, no todo eso que llamamos «artesanía» cabe en esta feria. «Buscamos productos distintos, lejos de circuitos comerciales habituales». «Pueden ser productos hechos a mano o productos fabricados a pequeña escala de forma local, porque a veces algunos procesos de fabricación hay que externalizarlos. No podemos pedir que todo sea 100 % hecho a mano porque no es realista en muchos caos. Lo que sí ofrecemos es un producto de calidad y de edición limitada por su carácter artesanal».
Así, cada mes de septiembre, se abre la convocatoria en la web del Festivalet y todo el mundo (de aquí y de fuera) puede enviar su propuesta. «Recibimos más de 500 solicitudes para participar y elegimos a los que creemos que encajan con el perfil de la feria y tienen más coherencia en su concepto de marca», nos aclaran desde la organización.

El cuidado en elegir a los participantes y la exigencia de gran calidad en los productos ofertados es lo que diferencia a Festivalet de otros mercadillos y ferias de regalos. «Damos mucha importancia a la calidad y origen del producto, acabados, presentación, diseño de marca y packaging», explican Alicia y Elisa.

Productos de decoración del hogar, bolsos y bisutería son los más buscados por el público. Pero también podrán encontrar comida delicatessen, complementos, publicaciones on line o en papel y productos y materiales para los que quieran practicar aquello del DIY. «La gente viene buscando los regalos de Navidad y siempre saben que cuando compran se llevan un producto único y diferente», comentan orgullosas las dos organizadoras. Este año, como novedad, incorporan los food trucks.


Aunque la calidad de los productos presentados sea alta, los precios no lo son. «Nuestros participantes intentan tener productos para todos los bolsillos. Obviamente si buscas precios de grandes marcas que fabrican en países asiáticos, no lo encontrarás en el Festivalet pero te aseguramos que hay precios para todos los bolsillos y todos son precios justos», comentan Roselló y Riera. «Además sabes que tu dinero va a gente de aquí, con lo cual inviertes en tu entorno y apoyas la economía local».
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*Yorokobu es medio colaborador de Festivalet