«En la trastienda de uno de los pocos ultramarinos que sobreviven en Madrid, entre piezas de bacalao, sacos de legumbres, encurtidos, sobres de gaseosa El Tigre, cascos de botellas y alpiste para periquitos, tiene su sede Conservas Gráficas S.M.L. (Sociedad Muy Limitada). Al frente, dos ancianos que comparten interés por las artes gráficas, pasión que satisfacen acumulando revistas ilustradas, cromos, tebeos y programas de cinematógrafo.
Desplazados a Cataluña durante el cerco de Madrid, fueron testigos de la
colectivización por parte de la CNT/FAI de la imprenta Domenèch & Hereu.
Aprovechando la ocasión, transportaron de vuelta a la Capital una vieja Minerva de aspas con la que, finalizada la contienda, imprimían octavillas subversivas que lanzaban en salas de cines, abandonaban entre las páginas de los volúmenes de La Casa del Libro o deslizaban en los bolsillos de los trajes de la sección de caballeros de Sepu.
Tras décadas de lucha anónima y de dudosa eficacia, Conservas Gráficas comienza a producir serigrafías destinadas a la juventud con la esperanza, propia de mentes seniles, de que sólo así las nuevas generaciones se convertirán en gentes de bien».
Esta es la historia oficial. La oficiosa la dejamos en suspense… por petición expresa de los responsables de Conservas Gráficas. Estuvimos con ellos en sus oficinas, un bar interesante y oscuro del centro de Madrid, para que, por un momento, se olvidaran de su historia antigua y ejercitaran la memoria reciente.
Nos situamos año y medio atrás. Fue en esa fecha cuando planearon crear Conservas Gráficas y sacar las dos primeras serigrafías. Pensaron en una temática (Bares) y encargaron la primera serie a dos conocidos dibujantes: Mauro Entrialgo y ATA.
De cada dibujo hicieron una edición limitada de 50 serigrafías. Cinco quedaron para los autores y las otras 45 se pusieron a la venta. El tamaño escogido fue de 18×24 centímetros. “Unas medidas optimizadas para el marco Ribba de Ikea”, explican. “La serigrafía puede enmarcarse así fácilmente y convertirse en un regalo capricho de lujo”.
La segunda serie abordó el ‘Rock and roll’. Las hicieron Mik Baro y Nono Kadáver. La tercera iba de ‘Chicas’ y la diseñó Fernando Vicente.
Conservas gráficas quiere recuperar las serigrafías en un tiempo que no les presta atención. “En EEUU sí hay un mercado para este tipo de ilustración. Especialmente, en el mundo de la música y el rock. En España hay muy poco. Todo se ha ido al plástico. Todo es de usar y tirar. La serigrafía, en cambio, es más arte. Son piezas únicas. No puedes tirarlas”, comenta Vicius, la persona de Hola por qué que hace las serigrafías.
El día que Mauro Entrialgo y Ata visitaron las oficinas de Conservas Gráficas, el bar oscuro, añadieron algo de historia del ultramarinos. Entrialgo escribió después:
“Mi sobrino me preguntó el por qué del tono azulado que había adquirido el envoltorio de un paquete de galletas Chiquilín, abandonado durante años en el escaparate de un ultramarinos madrileño.
Mientras le intentaba explicar al chaval los fundamentos del proceso de impresión en cuatricomía, salieron de aquel comercio dos hombres que se autoinvitaron a la conversación comenzando a precisar cada una de mis afirmaciones con detalles técnicos no solicitados. Así conocí a los peculiares responsables de Conservas Gráficas».
Y ATA añadió:
«Sonaba Money for nothing en los bafles del Renault Clio rojo del 96
de mi santa esposa, cuando veo a Manolito Tráfico cruzando por la Gran
Vía. Se me acerca a la ventanilla gritando:
– ¡¡Aparcad por ahí y nos vemos en el Batela!!
Pues ea. Dicho y hecho. A Manolito le conozco de cuando pasaba en una
discoteca de Lloret de Mar. Grandes abrazos y aspavientos al cruzar el
umbral del Batela.
– Ata, tío, tengo un proyecto que contarte…
– Quita, quita Manolito que me tiznas.
– Que nó, que nó (con acento en la o), que ahora me dedico al mundo del
Arte. Andaba pensando en alguien para encargarle una serigrafía temática,
¿sabes de qué tema? De bares, y vas y apareces tú como mi ángel de babel.
– ¿Ángel de Babel? ¿Qué hostias es eso?
– Anda, no me líes con tus mierdas…
– Que si te quieres hacer una serigrafía sobre bares y tal, que tú pilotas.
– Sí, claro, cuenta con ello… Oyes, una cosa, y con este cambio de rumbo
hacia el artisteo, la serigrafía, el cómic… ¿tu alias?
– Le he hecho un tunning de primaria. Ahora soy Manolito Gráfico».
Serie I: Bares
Dinobar, de Mauro Entrialgo.
Bar, de ATA
Serie II: Rock&Roll
Let’s go R’n’R, de Mik Baro
Air guitar, de Nono Kadáver
Serie III: Chicas
Martinis y Muerte, de Fernando Vicente.