En estos días, quienes tenemos la suerte de tener un trabajo recibimos decenas y decenas de e-mails con currículums. Son la dramática constatación de la cantidad de talento que está mano sobre mano en nuestro país. La cuestión es cómo conseguir llamar la atención, que ese trozo de papel en el que resumes toda una vida logre captar la atención del destinatario y, así, tener alguna posibilidad de ser contratado. Aunque sea remota. Aquí van siete aplicaciones que te ayudarán a tener un CV diferente a los demás.
La apuesta más clásica es la de Visual CV. Clásica por el formato resultante, pero bastante atractiva en cuanto a funcionalidades: un encabezado con tu foto, un cuerpo central con las cosas que has hecho y una columna derecha lista para embeber contenido, desde un vídeo con una presentación hasta imágenes o documentos que hayas creado.
Para los que sean usuarios de LinkedIn, la red social de empleo más extendida del mundo, quizá les interese el motor de creación de currículums que tiene el propio programa dentro de LinkedIn Labs. Lo que hace es tomar los datos de tu cuenta y volcarlos en plantillas para que tú elijas el diseño de un CV más pensado para imprimir y enviar que para el universo 2.0. Sirve, cuanto menos, para ahorrar tiempo.
Brazen, una bolsa de trabajo virtual, ofrece la posibilidad de integrar una aplicación con tu cuenta de Facebook y, desde ahí, tomar los datos de tu LinkedIn. El resultado: una infografía interactiva con tu perfil laboral, muy volcado en las redes sociales, y que funciona como una especie de juego del estilo Forsquare, con ‘badges’ que desbloquear según tus méritos. Una buena forma de buscar trabajo desde las redes sociales.
Si lo que buscas es una forma rápida y sencilla de crear un CV interactivo y visual, posiblemente Re.Vu sea una de las mejores opciones. Sencillo y funcional, le das unos pocos datos y los visualiza, el resto depende de tu gusto para elegir un fondo y para meterle algunos detalles.
La competencia directa de lo anterior es Vizualize.me, que también importa directamente los datos de LinkedIn y los representa gráficamente. Tiene más posibilidades de visualización, y también múltiples opciones de configuración. Y por si fuera poco, te permiten imprimirte camisetas con tu CV para convertirte en un hombre (o mujer) anuncio.
Otra opción es usar DoYouBuzz, una plataforma sencilla que también importa los datos de LinkedIn y que te ofrece maquetas para diseñar un CV online bastante convencional -con sus ventajas e inconvenientes-. Muchos de los esquemas que ofrecen son gratuitos, y otros tantos de pago. Permite descargar lo que hagas y, lógicamente, moverlo por las redes sociales.
La última de las recomendaciones es Kinzaa, que ofrece varias cosas a la vez: la integración de tus datos de LinkedIn, la personalización de tu perfil y un curioso test previo hecho con escalas que ayuda a dar una imagen de ti mismo bastante peculiar. Vale la pena probarlo, aunque sea por esto último.
