Cuando alguien compra una obra de arte millonaria, ¿en qué medida lo hace por el reconocimiento que tiene su autor y en cuál por el valor artístico de la obra?
Puestos a decantarse por una obra u otra, ¿tomarían las personas las mismas decisiones si no supieran quiénes son los autores? ¿Elegirían los mismos libros, decorarían sus paredes con los mismos cuadros, escucharían las mismas canciones?
Anónimos es un proyecto que reflexiona sobre la importancia de la autoría en la percepción artística al tiempo que persigue un objetivo solidario. La iniciativa, que celebra su segunda edición, está organizada por la Fundación San Antonio De Benagéber, y los fondos recaudados irán a parar a su Residencia de Mayores.
El formato es el siguiente: artistas de distintas disciplinas donan obras en formato postal que se ponen a la venta durante cuatro días (del 15 al 18 de junio) en el Mercado de Tapinería de Valencia. El precio unitario va disminuyendo según avanza el evento: 20€ el primer día, 15€ el segundo y 10€ los dos últimos. Si alguna postal no se vendiera durante esos días, se pondrá a la venta en la página web de la Fundación.
La técnica es libre, pudiendo abarcar por ejemplo pintura, fotografía, dibujo o collage. También lo es la temática. El único requisito es el soporte, una postal de cartulina de 20x15cm.
El director de la residencia, José Sancho Tello, explica que, aunque en ninguna de las obras se ve la firma, «en muchas de ellas se reconoce al autor», por lo que no deja de haber gente que compra por el nombre. Pero no hay lugar para la decepción porque, según él, «todas las creaciones presentan calidad artística».
Los autores menos conocidos tienen una ventaja clara en este tipo de formato: su obra es valorada con los mismos criterios que las de los autores consagrados, por lo que pueden hacerse una idea bastante objetiva de la acogida de su obra sin ningún condicionante distinto de los meramente artísticos.
En la edición de 2016, los asistentes se hicieron con originales de autores como Ripollés, Calo Carratalá, Javier Chapa o Curro Canavese por precios muy bajos. «Los precios son asequibles porque así se ha acordado previamente con los artistas y porque se trata de un proyecto solidario en el que implicar a la sociedad mediante el arte», puntualiza Sancho.
El formato postal se eligió «porque resulta atractivo y novedoso, porque su tamaño es cómodo y porque es fácil su envío mediante correo postal a los autores».
No es la primera vez que la Fundación San Antonio de Benagéber pone en marcha una iniciativa solidara relacionada con la cultura. Recientemente ha editado el libro Mayores sin reparos, en el que participan escritores noveles con diferentes relatos que se acompañan de dibujos de diferentes ilustradores jóvenes. «De este modo, también promocionamos a los autores emergentes y fomentamos la cultura en general».
En su primera edición, Anónimos reunió 600 obras de 300 artistas que consiguieron recaudar unos 3.000€ para la obra social destinada a los mayores sin recursos o con alto grado de dependencia. Las inscripciones para la edición del presente año están abiertas hasta el 30 de abril. Para recibir más información sobre el proceso de envío de originales, los interesados deben escribir un correo a anonimosbenageber@gmail.com.
Esta manera de elegir una obra de arte sin juicios ni opiniones previas es, quizá, la que más se parece a un flechazo entre la obra y el que la adquiere.