
Los arrepentidos inventores de las cosas que mรกs odias de internet
De inventores que se horrorizaron de su propia creaciรณn aรฑos mรกs tarde, tras ver las consecuencias, la historia estรก repleta. Nobel, arrepentido padre de la dinamita; Einstein, que escribiรณ a Roosevelt para aconsejarle acelerar el desarrollo de la bomba atรณmica (y luego lo lamentรณ); Kalashnikov, que preferirรญa haber concebido un cortacรฉsped, como รฉl mismo confesรณ aรฑos mรกs tardeโฆ En definitiva,