
¿Qué hubiera pasado si…?
Ella llevaba un vestido de flores y gafas de sol. Él, con la mano que no sujetaba su maletín, le dio un cigarrillo. Se cruzaron en la 5ª Avenida, en la esquina con la calle 13 en Nueva York. Una breve conversación, un intercambio de agradecimientos, quizá un par de cumplidos y ya está. Ahí terminó la historia. O quizá