Ibáñez: «Mortadelo y Filemón podrían haber sido todo lo contrario, gánsteres»
Hace 50 años que Mortadelo y Filemón, ataviados con sus mejores galas –tanto que el jefe vestía incluso una lustrosa americana roja–, se acercaban por primera vez a la sede de la T.I.A. Iban hacia un edificio imponente, con una arquitectura neoclásica soberbia. Solo que en el último momento giraron hacia una caseta destartalada contigua. Ese era su auténtico destino.