Los amores efímeros de Salvador Verano Calderón

¿Eres enamoradizo?
«Enamoradizo sí, pero mal correspondido», contesta Salvador Verano Calderón. Con esa respuesta se refiere a su asunto personal con cupido, pero por suerte no son esos los romances que le dan de comer. Para él, cada uno de sus proyectos es un Amor de Verano capaz de quitarle el sueño.
Amores de Verano es como llamó a su página web y a su espacio en Behance este joven diseñador gráfico mexicano, donde da fe de su pericia en ilustración y diseño interactivo.
Aunque él mismo no sabría definir su estilo, se intuye que será su devoción y su muñeca para dar un nuevo sentido al pop-art, el cómic americano y la estética años 50 las que le han reportado llamadas para dar color a medios como Yo Conic, Indie Rock, Marvin o el fanzine Combo.
«El pop art es novedoso porque es una moda que se recupera y los elementos retro han vuelto a nuestra cultura, una cultura en la que se abordan cosas que ya existían y vuelven a ser nuevas», explica sobre las bases de su inventiva.
Nunca pierde de vista los pilares de su rúbrica: «Muchos elementos mexicanos, la cultura con la que crecí, pero descontextualizándola. Incorporando otros elementos y mezclándolos con mis propios gustos, como puede ser el por-rock, el indie, o el folk…», sintetiza a pinceladas.
Para este creativo, la comparación entre los amores veraniegos y los proyectos creativos que elabora él, «o cualquiera», es básicamente nítida: «Pueden ser efímeros, o quizás un poco más largos, o que al final se conviertan en algo para toda la vida… Pero en todos hay una constante: el corazón. Aunque la ejecución no sea perfecta, son cosas hechas desde ahí mismo», argumenta.


Llamó a su espacio Amores de Verano porque se trataba de un recorrido hacia lo que él mismo, ‘Verano’, quiere dar a conocer. Y piensa que, sin necesidad de poseer su apellido, todos debemos enamorarnos de nuestros proyectos si queremos disfrutar de nuestro tiempo con ellos.
En sus trabajos es igual de fácil encontrase versiones eclécticas de un helado que a Don Ramón, el personaje del Chavo del 8, a las cuerdas de una guitarra eléctrica o a Chewbacca con un teclado electrónico al hombro.
A sus 24 ya ha logrado perfil de sobra para recibir encargos de carteles musicales, portadas de revistas, ilustraciones editoriales y páginas webs de diseño, aunque si tuviera que hacer un análisis del panorama de la ilustración en México, diría que «se puede mejorar». «Falta difusión y apoyo remunerado. Pero eso, en México y en todas partes. Creo que por ejemplo en este país hay un boom de la ilustración, con gente muy buena, de talentos interesantes y estilos distintos que a veces no logran seguir por falta de oportunidades».
Mientras llegan los refuerzos, él opta por cuidar sus creaciones como si se tratara del último verano.
Aquí podrás ver las ilustraciones interactivas de Verano:
Como por ejemplo 1
Como por ejemplo 2
Como por ejemplo 3