
En el ojo ajeno: Como una cacerolada en clase de yoga
El tren siempre es un caladero de sensaciones. Unas buenas y otras horribles. Hoy empezaba bien. He tenido suerte, voy sentado solo en un grupo de cuatro asientos de los que van enfrentados. Al otro lado del pasillo viaja una pareja que duerme desde el inicio del viaje. Encerrado en mis auriculares, decido recurrir a la playlist Piano Noir, que me