Probablemente es una pregunta que asalta a todos los padres y madres cuando miran a sus recién nacidos dormidos en la cuna. ¿Qué será de él en el futuro? ¿A qué se dedicará mi hijo? Tras el nacimiento de su segundo retoño, a Malo, el director de arte francés, le dio por pensar en estas cosas con una diferencia: en lugar de esperar, decidió adelantarse a los acontecimientos.
Durante tres meses aprovechó sus ratos libres para disfrazar a su hija con atuendos acordes a distintas profesiones y así imaginar todo tipo de devenires para la criatura: boxeadora, médica, profesional de lucha libre, abogada y hasta sacerdote. «Empezamos cuando tenía 3 meses y acabamos la serie cuando cumplió los 5 meses (…) la colocamos sobre un colchón y mi mujer y yo lo organizamos de tal manera que estuviéramos jugando todo el tiempo. Accesorios como la máscara de luchador o la de cirujano se añadieron luego con photoshop ya que era demasiado pequeña para llevar cosas en la cabeza», explica el creativo francés. «Hoy mi hija tiene 2 años y medio y le encanta verse en las fotos que hice de ella».
Despejadas las dudas, Malo ha podido dar rienda suelta a sus divagaciones pero tiene una cosa claro sobre el futuro de sus hijos: «Lo importante es que escojan lo que ellos quieran hacer en la vida».
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Malo es diseñador gráfico y fotógrafo freelance. Trabaja bajo el nombre MondayMonday. «Hago pósters para eventos culturales en París. Algunos de mis trabajos personales están expuestos en la galería Wanted de París».
