«Un árbol, otro árbol, un sendero, una solitaria casa de campo, Lenin… Un momento…» Durante aquel paseo en bicicleta por una zona boscosa cercana a Berlín, Carlos Gomes encontró una vieja estatua del revolucionario soviético frente a un cuartel militar abandonado. «Me sorprendió verla porque pensaba que ya no existían estatuas de Lenin en suelo alemán».
La situación le dejó tan atónito que decidió investigar.El sociólogo luso-germano supo entonces que aunque, tras la caída del Muro, la mayoría de las estatuas, bustos y demás imágenes de Lenin en Alemania fueron fundidos, enterrados o ‘exiladas’, en algunos rincones del país aún quedaban algunos monumentos de este tipo.
Pero lo que encontró en internet y en decenas de libros de la biblioteca no le resolvía sus dudas sobre cuántas estatuas quedaban y por qué. Por eso decidió crear él mismo un listado de los monumentos de Lenin que aún quedaban en pie en Alemania (salvo los que se encuentran en museos) y las historias detrás de cada uno de ellos.
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«Aunque han pasado 25 años desde la reunificación, el qué hacer con las estatuas de Lenin es un tema de alta tensión política y una cuestión todavía hoy controvertida respecto de la que los alemanes no alcanzan un acuerdo».
Lo que Carlos se proponía hacer no se limitaba a un mero recuento de ‘lenins’ en Alemania. Por eso contactó con la fotógrafa Eva C.C. para que le ayudase a documentar todo lo que iba encontrando.
«Queríamos realizar un trabajo creativo en el que Lenin, como ícono estético 25 años después de la caída del muro de Berlín, fuera el hilo conductor de una exploración histórico-literaria y un viaje fotográfico por la Alemania de hoy, pero también por su pasado».
En la web Leninisstillaround.com, Gomes va subiendo sus hallazgos. Su lanzamiento coincidió casi en el tiempo con el desenterramiento de la cabeza de una estatura de Lenin en Berlín, cuyas imágenes dieron la vuelta al mundo.
«Se trataba de la estatua en la que se inspiró película Good bye, Lenin. Gracias a un proyecto cultural, la cabeza de la estatua se desenterró. La pieza era solo uno de los 120 fragmentos en los que se había decidido seccionar el monumento, antes de proceder a su enterramiento para ocultar tan emblemática figura».
Entre los descubrimientos realizados durante este tiempo, Gomes quedó especialmente impactado por las vidrieras que decoran la biblioteca de la Facultad de Derecho de la Universidad de Humbolt, en Berlín. «Durante el verano de 1895, Lenin estuvo en estas instalaciones, cuando aún formaban parte de la Biblioteca Real. Allí investigó y leyó los textos de Marx y Engels».
De ahí que en tiempos de la RDA se colocasen allí las vidrieras con las imágenes de los tres iconos del socialismo que aún decoran la sala.
«Las vidrieras sobrevivieron al desmantelamiento de las imágenes sobre Lenin en Berlín. Y aún sigue generando una gran controversia. Las voces más críticas denuncian que aún se mantengan imágenes de Lenin en un lugar tan significativo como ese, donde los estudiantes aprenden lo que significa la democracia».