Superman puede volar, a toda velocidad, alrededor de la Tierra. Tiene visión de rayos-x y un oído ultra afinado. Spiderman puede trepar por el techo y tiene un radar personal que le avisa si alguien pretende atacarle. Pero ni uno ni otro saben de qué está hablando la humanidad en cada momento. Ese superpoder que otorgan las redes sociales a quienes las utilizan ha desmitificado a los héroes.
La historia es de Nacho Villoch. El director de marketing del Centro de Innovación de BBVA la contó esta mañana en un evento organizado por la AERCO (Asociación Española de Responsables de Comunidad Online), llamado Maximizar el uso de los canales digitales para facilitar su reactivación.
Villoch situó este hecho en un mundo en el que el país más poblado es China, seguido por India, EEUU y… ¡Facebook! Los 300 millones de personas que utilizan esta comunidad superan a la población de Indonesia, Brasil y el resto de estados del planeta.
Y después llegó otra historia del pasado y del futuro. La contó Jonathan Browne, analista senior de Forrester. Su charla partió de una imagen de un Benz Patent Motorwagen de 1886. Era uno de los primeros intentos de crear un automóvil. Pero nada tenía aún que ver con un vehículo. Parecía totalmente un carruaje sin caballo.
De ahí se produjeron varios intentos hasta que en 1928 apareció el Austin Rk Saloon, el primer coche con motor eléctrico, y fue cuando, según Browne, “se empezó a reconocer un coche como tal”.
El relato de la industria del automóvil se puede extrapolar a cualquier otra actividad. “Las nuevas formas de tecnología empiezan imitando los viejos métodos y sólo después alcanzan su forma verdadera”, dijo.
Mencionó Circa como una de las primeras webs (1991) y Mosaic como el primer navegador (1993). Ambas son copias fieles del papel y recuerdan incluso al pergamino que habían inventado los egipcios.
Desde ahí hasta ahora internet ha cambiado radicalmente pero aún estamos en “los primeros estadios de evolución de la Red”. “Las experiencias online tienen que encontrar su propia forma”, especificó.
Hasta aquí llegó el pasado y ¿qué se perfila para los próximos 5 años?
“Habrá muchos más tipos de dispositivos interconectados. Los dispositivos serán cada vez más pequeños y más potentes, y la tecnología se irá haciendo más táctil”, indicó Browne.
“Las experiencias online serán más customizadas (el usuario controlará cada vez más el contenido y la forma). Se tenderá más a los contenidos agregados, que irán a un único destino común. Serán relevantes, porque se recibirán en el momento y el dispositivo que el usuario haya decidido anteriormente, y serán sociales”.
Browne parafraseó la cita de William Gibson “El futuro ya está aquí. Es sólo cuestión de que se distribuya de forma uniforme”. Y mientras esto ocurre ¿qué hay que hacer para estar preparado? “Tener una visión multicanal de los consumidores porque están interactuando por muchos medios a la vez. Atomizar el contenido y las funcionalidades, y dar una importancia primordial al diseño”.
What a creative approach to social media. Retrospectively speaking , that was a truelly visonary statement. Congrats.