Tratar a un niño como un idiota seleccionando contenidos anodinos y simples o hablándole como si no entendiese nada convierte en estúpido al adulto que actúa así. En Barcelona, unos cuantos enamorados del arte contemporáneo pensaron que la manera de acercar el arte a los más pequeños no pasaba por reducir su mensaje al mínimo. Debían poner una especial atención en la elección de las obras. Así surgió PLOM Gallery, la primera galería de arte contemporáneo para niños, que abre sus puertas el próximo sábado 19 de octubre.
La aventura de PLOM es una carrera pedagógica hacia la lentitud, hacia el sosiego que proporcionan las obras creadas sin reloj y hacia, en general, una vida en la que el consumo rápido no tenga sitio. ¿Qué hacemos mal en la vida para eliminar en los chicos el ansia por la expresión creativa? En opinión de Martha Zimmerman, directora de la galería, «el arte requiere tiempo para hacerse y para disfrutarse, y la inercia que nos obliga a seguir adelante sin detenernos es la que acabamos inculcando a nuestros hijos y que ellos acaban reproduciendo. Así es como vamos, poco a poco, uniformizándonos. El arte es singular, único, igual que nosotros, y eso mismo es lo que debemos recordar al ver un cuadro», explica la galerista.
Estos principios teóricos se convertirán en filosofía aplicada a partir del próximo sábado con la apertura de puertas e inauguración de la primera exposición PLOM Gallery y Los Superpoderes del Arte. «Sabemos que el arte es una poderosa herramienta pedagógica, de ahí sus superpoderes. El arte nos ayuda a descubrir el mundo, a verlo con una mirada nueva y diferente que nos ayuda a crecer como personas. Así que, para inaugurar el espacio hemos seleccionado de entre nuestro catálogo aquellas obras que pensamos que mejor representan esta idea de los superpoderes del arte», cuenta la directora del espacio.
El criterio para escoger las piezas fue sencillo: debían poder ocupar espacio en la habitación de un niño. Así, en la galería se libraron de corsé y prejuicios y eligieron trabajos adecuados de artistas a los que representa la galería. Entre otros, expondrán Eva Armisén, Ed, Ibie, Maxi Luchini, Blanca Hernández, los Brosmind, Amaia Arrazola, Pep Brocal, Carmen Segovia, Coqué Azcona, Miju Lee o Sergio Mora.
Para Zimmerman, el arte infantil no implica llenar las paredes de princesas, Pocoyós, coches y guerreros. De hecho, la idea pasa por esforzarse para exponer obras que, inicialmente, no han sido concebidas para los niños. Si el arte es algo natural e intrínseco al ser humano desde pequeño, eliminar las categorizaciones quizá sea el enfoque más lógico.
Para comprobarlo, PLOM Gallery tiene su sede en Séneca 31, en Barcelona.