¿Es Portland realmente una ciudad de urbanitas excéntricos?

21 de julio de 2013
21 de julio de 2013
3 mins de lectura

Portland nunca será lo mismo. Hasta 2011 era una ciudad más de EEUU. Desde enero de ese año es un lugar donde habitan miles de personas obsesionadas con ir en bici, la comida sana y las modas de civismo urbanita. La serie de TV Portlandia movió su lugar en el mundo de la nada al epicentro de una legión de idealistas, adultos aniñados y personajes un tanto excéntricos.
El fotógrafo Kirk Crippens viajó hasta esa ciudad. Estuvo cinco semanas y conoció a muchos de sus habitantes. Buscaba a los auténticos portlanders. No le importa su similitud con los individuos que caricaturiza la serie, aunque algunos de ellos, a menudo, parecen haber sido rescatados de escenas de esta comedia.
Crippens visitó al antiguo alcalde de la ciudad, a un camarero, a un emprendedor tecnológico, a una stripper, a un mecánico, a un fugitivo, a una enfermera… Los capturó en 45 imágenes y de ahí creó su colección de fotos Portraitlandia [título que mezcla las palabras Portrait (retrato) y Portlandia (serie de TV)]. “Durante el mes de abril intenté conectar con la ciudad mediante el arte de hacer retratos”, indica el fotógrafo de San Francisco. “De algún modo, Portraitlandia, a pesar de ser un nombre absurdo y desenfadado, de repente me pareció el título perfecto para un proyecto de retratos creado en Portland en 2013”.
Y: ¿Qué te llevó a realizar este proyecto?
K.C.: Antes de estancia en una residencia de artistas en el centro de fotografía Newspace, en Portland (Oregón), empecé a pensar en formas para conectar con la ciudad durante mi visita. Escuché algunas informaciones sobre John Brennan (el hombre que se desnudó en el aeropuerto de Portland en protesta por el uso del escáner) y pensé que sería interesante hacer fotos de portlandeses icónicos. Hice una lista de posibles personas que podía retratar: Tres Shannon, fundador de Voodoo Doughnuts; Sam Adams, el anterior alcalde de la ciudad, o el excéntrico millonario John McAfee, aunque acabara de llegar a la ciudad. Quería encontrar un grupo representativo que mostrara la diversidad de sus ciudadanos. Por eso no solo busqué a personas conocidas. Quería individuos de todo tipo para mostrar todas las caras de la ciudad: una cartera, un mecánico, una monja…
[pullquote]»¿Cuál es el peor título que puedes pensar para un proyecto de retratos hecho en Portland? Mi respuesta fue: Portraitlandia»[/pullquote]
Al final de mi estancia en Newspace expuse las imágenes en una charla de artistas y lancé una pregunta al público antes de presentar las fotos: ¿Cuál es el peor título que puedes pensar para un proyecto de retratos hecho en Portland? Mi respuesta fue: Portraitlandia. Pero, irónicamente, después de mostrar mi proyecto, varios portlandeses me insistieron en llamar así a la serie de fotografías. Al principio me mostré reticente. Acababa de decir que me parecía el peor título posible, pero fueron muy insistentes. Me dijeron que eso era justamente lo que había creado. Había hecho Portraitlandia.
Unos días después, cuando estaba viendo un episodio de Portlandia, apareció una cara familiar. ¡Era John Brennan! En otro sketch apareció el alcalde Sam Adams y en la siguiente escena salió Jedediah Aaker, un tipo que había posado para mí en su traje de león. Ese episodio tenía a tres personas que habían posado para mí como extras. Fue un momento surrealista. El arte estaba copiando la vida real. Pensé que esta serie de televisión tontorrona y divertida parecía amar, realmente, a Portland y utilizaba el humor para reflejar el honor de la ciudad.
Y: ¿Hay realmente una identidad de portlander? ¿Cómo describirías a los portlandeses?
K.C.: Para mí, la ciudad de Portland es especial y, además, este es un momento especial en su historia. La mayoría de portlandeses que conocí estaban muy contentos de vivir allí. No encuentras ese sentimiento en todos sitios. Es muy difícil definir la ciudad. La libertad que sienten sus ciudadanos por ser realmente quienes son crea un ambiente muy expansivo.
Y: El proyecto destila un humor muy fino. ¿Por qué decidiste emplear esa mirada?
K.C.: Nunca ‘decidí’ usar el humor en Portraitlandia. El humor y la diversión son el resultado natural de fotografiar a esos ciudadanos en sus ropas originales y su hábitat natural.
k19
k5
k11
k1
k2
k3
k4
k6
k7
k8
k9
k10
k12
k13
k14
k15
k16
k17
k18
k20
k21
k22
k23
k25
k26
k27
k28
k29
k30
k31
k32

No te pierdas...