Realities, ¿un nuevo indicador económico?

29 de marzo de 2011
29 de marzo de 2011
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La venta de lápiz de labios, sobre todo los de color rojo, está consolidada como indicador económico. En Estados Unidos podrían haber descubierto otro: los realities.

Tres años atrás, con la economía mundial en plena caída libre, los productores televisivos decidieron pensar en nuevos escenarios para sus programas. Y así comenzaron a idear fórmulas como Pawn Stars o Storage Wars en los que se muestra el día a día de los propietarios de casas de empeños y el de los pujadores de bienes embargados, respectivamente. La situación económica dentro y fuera ‘de casa’ no invitaba al optimismo y esa era precisamente la realidad que mostraban la telerrealidad, valga la redundancia.
Ahora, con el repunte económico de la economía estadounidense, en The New York Times se preguntan si la audiencia está dispuesta a consumir una visión más optimista de la realidad.
La propia publicación trata de responderse a sí misma y para ello recurre al share cosechado por programas como Shark Tank, reality que la cadena ABC ha repuesto y cuyos concursantes son emprendedores que tratan de conseguir apoyo financiero para sus negocios de un grupo de capital riesgo. Aunque los datos de audiencia están lejos de las cifras de los programas líderes, el reality ha conseguido superar los alcanzados durante su primera temporada en antena.
American’s Next Great Restaurant es otro de los realities por y para emprendedores. En este caso, los concursantes aspiran a alcanzar la financiación inicial necesaria para la apertura de su propia cadena de restaurantes. Con cerca de 4,3 millones de espectadores, el programa de la NBC está detrás de otros shows emitidos a la misma hora durante la noche del domingo. Eso sí, el seguimiento de ‘American’s Next Great Restaurant’ durante su reposición en la noche de los martes cuenta cada vez con más seguidores.
A Paul Teledgy, directivo de la cadena, la aceptación de este tipo de programas por parte de la audiencia no le sorprende: “La creación de riqueza y el capitalismo son conceptos intrínsicamente ligados a la mentalidad norteamericana”.
Y mientras esto ocurre en Estados Unidos, las principales cadenas generalistas españolas siguen sus propias directrices en materia de realities. Extrapolar el caso norteamericano a nuestro país resultaría impensable… ¿O tal vez no? En ese caso, ¿qué lectura económica podría realizarse, por ejemplo, del precipitado adiós de OT o del estreno de El reencuentro?

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