Hace unos años aparecieron unos zapatos capaces de guiar a su dueño por la calle sin necesidad de abrir los ojos. El calzado, llamado Lechal, va guiando los pasos de la persona que los viste mediante unas vibraciones que le indican hacia dónde ir. Andar con estas zapatillas haría el camino más fácil a los 285 millones de personas con graves problemas de visión que la Organización Mundial de la Salud dice que hay en el mundo. Esta es la intención de Ducere Technologies, la compañía que los inventó, según explicó Anthony Vipin Das cuando en 2013 presentó este dispositivo de tecnología vestible desde el escenario de TED Fellows.
Anthony Vipin Das es una de las personas «innovadoras» que TED Fellows selecciona cada año por los proyectos que llevan a cabo. El programa busca «emprendedores, inventores, makers, inventores, artistas, autores, directores de cine, fotógrafos, músicos, líderes de ONG, científicos, empresarios y activistas de derechos humanos» que, además, «tengan un carácter extraordinario».
Los elegidos presentan su proyecto en el ámbito de TED y reciben la ayuda de esta organización sin ánimo de lucro para impulsarlo y que tenga un mayor impacto en la sociedad. «Los fellows son catapultados al escenario mundial, reciben aclamación y respaldo a su trabajo, y encuentran colaboración profesional dentro y fuera de la red de fellows», explica el fundador y director de este programa, Tom Rielly. «También son importantes los beneficios emocionales y psicológicos de convertirse en un fellow. A veces es duro trabajar solo y puede surgir la idea de renunciar. En este programa encuentran un nuevo reto y una nueva comunidad».
TED Fellows comenzó en 2009 porque, según Rielly, esta organización convertida hoy en uno de los grandes archivos del conocimiento actual se dio cuenta de que en sus eventos empezaban a «echar de menos voces importantes». «Necesitábamos dar un nuevo giro a la conversación. Si teníamos que reunir a algunos de los jóvenes más brillantes del mundo que estaban realizando iniciativas interesantes, debíamos añadir al concepto de Ideas Worth Spreading (Ideas que merecen ser divulgadas) el concepto de Ideas Worth Doing (Ideas que merecen ser llevadas a cabo). Los fellows contribuirían con sus ideas, inspiración, entusiasmo y, sí, también con charlas TED. Los miembros de TED le ofrecerían consejo, mentorship y apoyo en su trabajo como fellow».
La convocatoria para los fellows de 2016 estará abierta hasta el próximo 20 de septiembre y, de acuerdo con Rielly, lo que buscan no es solo que los aspirantes sean «muy buenos en una actividad». «Parte de lo que hace diferente a un fellow del resto de personas es su increíble habilidad para integrarse y sintetizar múltiples intereses y disciplinas en una única idea, proyecto, producto o colaboración». Como ejemplo cita a Ola Orekunrin, empresario y piloto de helicóptero; Lucianne Walkowicz, astrofísico y artista; o Nina Tandon, ingeniera, profesora, empresaria de biomedicina e instructora de yoga.
El fundador indica que es importante que los aspirantes presenten proyectos ya realizados porque, como dicen en su web, buscan individuos que hagan cosas en lugar de personas que cuenten cosas. «Sorpréndenos con las organizaciones que has montado, las causas por las que has luchado, las investigaciones que hayas hecho o el trabajo artístico que hayas realizado», indican, porque «las acciones hablan más alto que las palabras». O como diría la sabiduría popular, «hechos son amores y no buenas razones».
Foto de portada: La fellow Camile A. Brown, fotografiada por Matt Karas, para el blog de TED Fellows.
TED busca 'innovadores' para ayudarles a impulsar sus proyectos
