“Es lo efímero de la tecnología versus la perpetuidad de un tatuaje”. Fred Bosch describe así su nuevo tatuaje. Está en su brazo y tiene forma de código QR. Aunque no solo tiene aspecto de QR. Funciona como un QR. Cada vez que alguien escanea el tatuaje aparece en el móvil un contenido diferente. El creativo interactivo lo ha llamado The Random Tattoo y explica que van apareciendo de forma aleatoria “vídeos, fotos, frases, tuits, gifs animados, el tiempo…”.