Decía Ursula K. Le Guin (1929-2018) que las rutinas diarias de la mayoría de las personas son tan pesadas y tan artificiales que no nos queda más remedio que cerrarnos al mundo. Al mundo en toda su amplitud: los sentidos, los detalles, la imaginación.
Contaba la escritora fantástica que los adultos tenemos que hacer esto para poder cumplir con nuestro trabajo y la vida que nos hemos montado. Pero allí, al fondo, imprecisa, se vislumbra una vía de escape: el arte.
«Creo que uno de los propósitos del arte es sacarnos de estas rutinas», escribió. «Cuando escuchamos música o poemas o historias, el mundo se abre de nuevo».
Es como si, de pronto, limpiaran las ventanas de nuestra percepción, decía el poeta y pintor británico William Blake.
La autora de ciencia ficción pensaba que el arte va mucho más allá de la música y la pintura. La historia, el relato del pasado, también es una forma de arte. No es una ciencia, aunque a veces quiera pasar por ella. No, no puede serlo.
«La historia es una forma de contar historias igual que lo hace la mitología, la ficción o la tradición oral. Pero en los últimos siglos esta disciplina ha huido de otras formas de storytelling porque se ha proclamado como algo absoluto, como la verdad objetiva», pensaba.
Aunque esa idea, por fortuna, desapareció. Decía Le Guin que los historiadores actuales vieron el absurdo de hacer del pasado un monumento de mármol y se rieron de la altanería de imaginar siquiera que pudiera existir una verdad absoluta.
«Los historiadores están de acuerdo en que cada época tiene su propia historia y si hay una única verdad, no podemos alcanzarla con palabras».
Fuente: Talking on the Water
Ursula K. Le Guin
me parece que decir que el arte
es solo para sacarnos d la rutima ,
es una observacion propia de una persona muy pobre emocionalmente
Y es justificar que el arte no vuelva a ser tbn algo que fue,
y que es compatible con lo que es y lo que dice
belleza y armonia