Los héroes acuden cada dos o tres semanas para recibir la dosis de quimio necesaria para renovar su poder. El hospital se convierte para ellos en algo parecido al cuartel general de Batman o de Ironman, solo que en lugar de sofisticados trajes y armas antivillano, lo que allí atesoran es el remedio para combatir su enfermedad. La valentía y la fuerza para lograrlo la ponen ellos. Por eso son héroes.
Aunque por muy superhombre o supermujer que uno sea, el desempeño de una misión de tal calibre no está exenta de contratiempos. Los efectos secundarios de la quimio suelen hacerse notar pronto y eso lo sabe Ana del Fraile, quien se convirtió en heroína a los 26 años, cuando le detectaron un cáncer de mama. «La aparición de úlceras en la boca, también llamada mucositis, es bastante frecuente». El frío es el mejor remedio para combatirlo por lo que es frecuente ver a los pacientes con un cubito de hielo en la boca mientras reciben el tratamiento.
Una vez superada la enfermedad, Ana ha puesto en su punto de mira este método «efectivo aunque muy rudimentario». Lo ha hecho desde We can be heroes, asociación con nombre de letra de canción de Bowie que fundó hace un tiempo junto a Mario Chimeno. Su objetivo es «ayudar a los pacientes de cáncer a hacer un poquito más llevadero su día a día».
El resultado ha sido el kit ‘We Can’ cuyo principal elemento es un molde con el que poder fabricar chupa-chups de hielo. «Con estos chupa-chups se resuelve la incomodidad de tener que utilizar los cubitos».
Los moldes ya están a la venta a precio de coste en la web de la asociación. «No descartamos hablar con otras asociaciones que quieran ayudarnos a llevarlos a todos los hospitales que podamos».