Hay quien estos días convive con el miedo a volver un día a la oficina y tener que enfundarse de nuevo los vaqueros o los pantalones de pinzas. La posibilidad de que la distancia entre ojal y botón se haya convertido en insalvable durante la cuarentena (por culpa de algún que otro pliegue abdominal de más) les aterra.
Pero no más que el pensar en la incomodidad que supondrá pasar una jornada completa con ropa de calle, tras más de dos meses en chándal y/o pijama.
Porque ni siquiera las vídeconferencias han privado a muchos del placer de trabajar con ropa de andar por casa. Al menos de cintura para abajo. La camisa planchada ha combinado con el pantalón de jogging como nunca antes.
La nueva versión del arreglá pero informal ha imperado en reuniones telemáticas de medio planeta. En Japón, incluso, han diseñado una prenda para este tipo de sesiones de teletrabajo. Se trata de WFH Jammies (Work For Home Jammies) y ha sido ideada por Whatever Inc. El estudio de diseño y agencia creativa ha contado con la colaboración de Akihiko Kimura, diseñador de la marca de moda LOKITHO.
WFH Jammies es un pijama con cuello y pechera de camisa. Es justo a partir de la zona que queda fuera del encuadre en una vídeollamada donde la prenda empieza a dejar al descubierto su verdadera naturaleza.
Sus creadores dicen que el atuendo permite acudir a cualquier reunión online con la comodidad que solo brinda el hogar y sin deparar en el qué me pongo.
Para el lanzamiento de WFH Jammies, Whatever Inc. ha abierto campaña en Kickstarter. Los partícipes en la campaña contribuirán a que la prenda se convierta en realidad en sus tres versiones: camisa blanca con jersey gris, camisa rosa con jersey negro o camisa de rayas azules con jersey gris oscuro. Un pijama-traje para cada ocasión.